Happily (2021)

Me veo en la obligación moral de dar testimonio de semejante empanada mental,

Las Premisas de tal hecatombe son:

-         Una pareja que nunca se pelea

-         Sus amigos que la detestan por ello

Parece que puede ir bien, una tuerca de vuelta, una nueva perspectiva...Y de repente:

-         Aparece un individuo que les ofrece una especie de vacuna para que puedan pelearse como toda pareja viviente...

Aquí, ya te das cuenta que el guionista va muy perdido... Que no encuentra camino firme.

-         Luego un muerto que resucita sin más explicación.

-         Una reunión de amigos en una casa alquilada con una habitación llena de armas.

Y aquí ya certificas que no hay posibilidad de enderezarlo...que es irreparable... se viene a bajo...la empanada mental es de tal calibre que no la ves ni venir.

Si optas por acabar de verla que sepas que el batacazo es monumental.

Hubo un tiempo en que los guiones, aunque fuesen sencillos, tenían sentido. Ahora parece que si dices lo primero que te pase por la cabeza tiene premio.

Llegará el día en que este tipo de tomadura de pelo podrá denunciarse en comisaría... Solo a partir de entonces podremos volver a ver buenas historias.

 

Una cinta curiosa y extraña que muestra casi tantos aciertos como fallos en el debut de BenDavid Grabinski.
Entre sus puntos fuertes se encuentra su estilo visual, bastante potente en ocasiones, su buen reparto capaz de pasar del drama a la comedia con agilidad, y unos planteamientos chocantes que buscan retar al espectador, sumergiéndole en un mundo de posibilidades paranormales sacado de The Twilight Zone.

Por desgracia, sus cambios bruscos la hacen algo arrítmica, por momentos pierde su rumbo, su guion va resultando más inconsistente e incluso generando lagunas peligrosamente absurdas, y en general va claramente de más a menos.