Men and War Part III (1973)

Final de la trilogia dirigida por Satsuo Yamamoto basada en la novela de Junpei Gomikawa, autor también de “La condición humana”, y quizá la parte que más similitudes comparte con esta, como la parte de la instrucción militar y el trato a los reclutas así como la forma de hacer política y las ideas tradicionales que no se correspondían con la situación que debían afrontar.

Shunsuke hace lo que puede como estadista, intentando llevar el sentido común a una audiencia que no quiere escuchar, Shimegi casi ha aceptado su destino, sabiendo que con sus ideales y las fuerzas que lo empujan más allá de su control poco puede hacer. Yoriko ama a Shimegi, y se muestra como una persona llena de bondad, demostrando que el origen no es lo único que importa.

Para la compañía Godai las cosas comienzan bien, sus contactos e información privilegiada por parte de altos cargos y banqueros les permiten anticiparse y llevar a cabo un plan de nuevas empresas así como de refuerzo de las existentes, escapando o eliminando los mecanismos de control que habían tenido en su camino, y la movilización general da comienzo.

En esta parte es donde quizá se notan más los saltos en el tiempo y en los personajes para poder completar la historia dentro de su marco, faltando algunas piezas o dando esa sensación por así decirlo, en que muy posiblemente existía mucho más material.

Hacía el final la parte bélica da comienzo, pero no es tan sencillo como manejar los recursos, la guerra lo devora todo, incluyendo a sus propios amos. Se convierte en una tormenta, una fuerza de la naturaleza que escapa del control humano, adquiere fuerza e inercia propias hasta llegar a ser imparable y pasa por encima de cualquier persona, independientemente de su bondad, inteligencia, amabilidad, mezquindad, de lo que sea justo o correcto, de lo que hubiera en cada alma que se vea afectada.