Dieciséis años (1943)

Se cuentan varias cosas y es interesante ver como todo el conflicto tiene que ver en gran medida con la época, sirve para conocer la forma e que la burguesía lidiaba con los problemas sentimentales y familiares en los años 40s.
Alicia es una viuda joven y muy atractiva que se vuelve a enamorar, su hija adolescente Lucía no puede aceptar eso ya que tiene la imagen de su padre idealizado y considera una traición tanto a su memoria como al amor que ella le tiene como hija.
Todo se da porque Alicia en su momento quiso que sus hijas creyeran que su padre era un hombre excelente y no uno inseguro y alcohólico que por lo que dice la hacía pasar "indignidades" supongo que mínimo violencia psicológica. Por lo tanto Gustavo para ella no es solo un nuevo amor sino la oportunidad de conocer la felicidad de pareja. Pero como Lucia no tiene idea de esto, y está en plena adolescencia se hace un montón de ideas en la cabeza que calla y trata de reprimir al igual que hizo su madre con su pasado matrimonial, eso me pareció lo más interesante, ambas por o hacer infeliz se guardan algo que les ayudaría a entenderse mutuamente, se deben una charla adulta que aclare las cosas.
Lo mejor: como se va construyendo el relato y volviéndose más oscuro, esa adolescente dulce e inocente convertida en una persona opaca, callada, resentida e histérica. Un muy buen cambio de registro para María Duval, porque empieza en uno de sus típicos roles y va avanzando y despojándose del mismo.
También Christensen logra mostrar los diferentes estados de animo de Lucia a través de metáforas, la luna escondiéndose detrás de la luna, los juegos de luces y sombras.
Lo peor: el final, le resta mínimo un punto, es muy malo, apresurado, ridículo e incoherente con la forma en que habían llevado la historia.