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Fuego en el mar (1979)

Sinopsis
Mariano trabaja como jefe de perforadores en una plataforma petrolera de Campeche. Por la naturaleza de sus labores debe permanecer en ella 14 días al mes; el tiempo restante lo pasa al lado de su esposa Gloria y su hija adolescente. Sin embargo, vive obsesionado con la idea de que su mujer, durante sus largas ausencias, lo engaña. Por ello una y otra vez le pide que deje de trabajar y se embarace por segunda vez. Sin embargo, Gloria se niega a depender económicamente de su esposo. Los conflictos de la pareja se agudizan cuando el ingeniero Becker, antiguo amante de Gloria, comienza a trabajar nuevamente en las oficinas donde ésta labora. Así, Mariano imagina que encuentra a Gloria y a Becker en la cama, por lo que los mata a balazos. Los celos deterioran cada vez más la frágil estabilidad del matrimonio. Mariano golpea a su mujer, quien hace intentos infructuosos por salvar su relación de pareja. (FILMAFFINITY)
Género
Thriller Drama
Dirección
Reparto
Año / País:
/ México México
Título original:
Fuego en el mar
Duración
111 min.
Guion
Música
Fotografía
Compañías
Premios
1979: Premios Ariel: 2 Premios incluyendo Mejor Actriz. 6 Nominaciones
7
Pozos en la mente
Segunda obra que visiono de Raúl Araiza, la primera fue la estupenda "Cascabel", y ya voy formándome que, por lo menos en su etapa de mayor libertad, se demostró como un director de valor y talento. Aún y con esas no pasará a la historia del cine mexicano, salvo para unos cuantos ratones de filmoteca... que aquí estamos.

A pesar de las frases introductorias de la cinta, no creo que se tenga que tomar la historia como una visión del trabajo en las petroleras. La radiografía del trabajo en las plataformas es expuesto con verosimilitud, aunque antes sirve para darle mayor solidez a la narración. Su principal propósito, o al menos así lo recibí yo, lo encuentro en otro lado.

La plataforma petrolífera puede ser vista como un rasgo mexicano. A causa del combustible ha tenido no pocos problemas en el siglo XX con su vecino del norte e interiormente también le ha producido no pocos conflictos a causa de la corrupción, que ha propiciado una gestión deficitaria que la sociedad ha recibido en forma de gasolinazos o huachicoleros. La lectura está ahí, no obstante insisto en que sirve para otros fines. Yo lo veo más como una metáfora del personaje central, la soledad de la plataforma es la de él mismo, que es perforador y precisamente cuanto más se hunde en su mente, en sus obsesiones, más se acentúa su problemática, que se concentra en su vida matrimonial.

Ya en el título se evoca tanto la idea del desastre como el contraste entre dos elementos antagónicos. Conforme conocemos a los personajes percibimos que se centrará en esa relación marital y cómo le afecta al protagonista, interpretado por Manuel Ojeda, que se ve obstaculizado tanto por los turnos laborales como por su mentalidad, sumamente rancia y retrógrada. Por un lado, el personaje central es incapaz de aceptar que su mujer tiene un pasado con otros hombres de la misma forma que él lo tiene con otras mujeres. Por otro, tampoco encaja muy bien que su esposa posea metas profesionales y personales al margen de las suyas, se percibe en todo momento que la situación mejoraría si ella permaneciera en casa, fuera de la vista de otros hombres, y teniendo hijos para satisfacción del esposo. Es en esta visión arcaica y ensimismada que incrementa el contraste entre las personalidades de ambos, ella busca su independencia y él la confortabilidad de las ideas recibidas.

En ese sentido, me parece un acierto la caracterización de él, alejada de las hombradas a lo Jorge Negrete, más bien como un hombre bastante convencional, con lo que resulta más identificable, y retraído, propicio a esas introspecciones que movilizan la narración y sirve para perfilar cierta mentalidad que así no se disimula en la excepcionalidad del protagonista o su circunstancia.

Han pasado más de cuarenta años desde su estreno, bastante se avanzó en el terreno de la igualdad, mas en el fondo también comprendemos que de forma limitada, cabría preguntarse si las motivaciones de la esposa resultan comprensibles y aceptables a la gran mayoría de espectadores. De cualquier manera, más allá del marco temporal, por más que el protagonista nos parezca hoy grotescamente machista, la historia resulta perfectamente comprensible por sí sola, tampoco es que esa mentalidad arcaica se haya evaporado, lo cual indica que estamos ante una obra hecha con criterio, al margen de las convenciones del tiempo en el que surgió.

Y sin embargo, también es necesario tener en cuenta ese marco temporal para comprender que en su estreno debió resultar muy valiente exponer semejante escenario, ¿cuántas críticas no le dispensaría la prensa más reaccionaria? Es así como yo creo que se ha de fijar el valor de una obra de ficción, cuando se puede ver sin tantos entrecomillados y excusas, como diciendo que está bien que John Wayne se lleve arrastrando a tal señora del pelo porque al fin y al cabo quien dice 1961 dice 1061, verdad? Yo creo que no. Con "Fuego en el mar" no es necesaria tanta puntualización y contextualización, porque por sí sola se defiende bien. Es necesario que ellas se puedan defender solas.
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