El secreto del capitán O'Hara (1968)

Muy flojo chorizo western, que es como se denominaba a las pelis del oeste producidas enteramente por España.
En esta ocasión se adapta (lo que en parte tiene que ver con su poca calidad) una de esas "simpáticas" novelitas a cargo de diversos "literatos" de nuestra geografía, que casi siempre firmaban bajo anglosajón pseudónimo. Aquí es Clark Carrados, y su obra "El capitán fracaso".
La peli es muy mediocre y no sólo en cuanto a guión, flojo y carente de la menor verosimilitud, sino por la poca fuerza que tienen sus melifluas imágenes, hecho que se acrecienta en las escenas de peleas entre indios y blancos. Los embistes de los indios se filman como si fueran un grupo de personas a caballo que se dirigen a la Feria de Abril. Y las luchas cuerpo a cuerpo carecen de tensión y dramatismo.
Los diálogos son convencionales y previsibles, así como el desenlace de la historia, que no puede ser menos convincente y anticlimático.
En resumidas cuentas, que es más bien mala, aunque se salvan aspectos técnicos como la bella fotografía a todo color y pantalla.

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Nada que ver con la narración de Teófilo Gautier varias veces llevada al cine de "El capitán Fracassa", la cinta que nos ocupa está basada también en una novela casi homónima y con la que nada tiene que ver el argumento, "El capitán Fracasos". Obra de Luis García Lecha, autor de varios cientos de novelas de kiosco (Toray, Bruguera, etc.) ambientadas en el Oeste y firmadas como Clark Carrados.
O sea, un colega que nos hace mirar la película con cierta simpatía.
La historia es el enfrentamiento entre dos compañeros de promoción. El coronel O'Hara (Cobos) degradado a capitán en un consejo de guerra por el testimonio en su contra del ahora comandante Brush (Vidal).
Sus caminos vuelven a encontrarse ahora en el Fuerte San Antonio, con la bella Mary (Padovan) por el medio.
Historia convencional de ambiciones, envidias y celos, con el consabido jefe indio prudente que tiene un hijo descerebrado e, incluso, un desaprensivo traficante de armas que se va de rositas al final.
Correcto guion y realización con mucha acción pero muy descuidada. Los ataques de los indios al fuerte resultan ridículos por su simpleza. Algo se salvan los personajes y los paisajes madrileños que sirven de fondo.
También la música que incluye una marcha marchosa y pegadiza que se repite a cada paso.
En cuanto a interpretaciones se salva Cobos, Blanco y poco más. Algunas penosas.
Western regular que vemos con simpatía sabedores que está basado en una novelita del Oeste de las de bolsillo. Nuestra especialidad.