Cleopatra Jones (1973)

Quiero homenajear desde FA y a través de esta película a una revista que marcó mi adolescencia y condujo en cierto modo mi gusto por cierto tipo de mujeres. Me refiero a la revista Ebano, revista erótica festiva dedicada en exclusiva a mostrar señoritas negras en paños menores.
Cuando al fin reuní el valor suficiente para comprar revistas eróticas en un kiosco cercano a mi casa, de entre todas las que vi expuestas (culos grandes, grandes tetas y demás partes de la anatomía femenina de diversos tamaños) la que suscitó en mi mayor interés fue una en la que aparecía en portada una belleza negra con un gran afro y posando en actitud de pedir guerra. Superado el impacto inicial y con la curiosidad (y mas cosas) picándome, la adquirí inmediatamente olvidándome de la vergüenza que sentía ante el dependiente. Desde entonces fui cliente asiduo de esta revista y un gran admirador de estas bellezas.

Y es por eso que de esta película destaco a la impresionante Tamara Dobson y su gran interpretación de la carismática Cleopatra Jones. Una agente especial del gobierno que lucha contra el tráfico de drogas a base de karate, armas pesadas, mala leche y humor corrosivo.
Sin duda el punto fuerte de la cinta es el duelo Cleopatra Jones-Moomy, la supervillana pelirroja, regordeta y lesbiana, que sin duda esconde tras su odio visceral hacia Cleopatra una atracción sexual frustrada.

Punto extra para la escena final en el desguace de coches y para el Corvette de Cleopatra.

Creada en los 70, en pleno auge del blaxploitation, y surgida como una versión femenina de Shaft, se trata de una entretenida y psicotrónica cinta de acción, con una agente que es una especie de James Bond, experta en karate, sensual, deslenguada y con unos psicodélicos y ajustados modelitos. Tuvo una secuela, titulada Cleopatra Jones y el Casino de Oro. Muy entretenida.