Kada kien su karma (2008)

Serás medido… Que gran dicho de nuestros abuelos, quienes tenían todo el conocimiento para expresarlo, frase frecuentemente utilizada para consentir o reprobar las acciones que veían de las personas; palabras llevadas por el viento, pero retornadas tarde o temprano a nuestra mente por la propia experiencia y esas acciones que han deparado lo justo por cada paso que hemos dado, no importa cómo ni cuándo, la justicia divina es inevitable, a todos nos llegará nuestro karma o darma.

Esta película apuesta por la historia de dos maduros cincuentones que experimentan su reencuentro tras la dura separación vivida un año antes. Eva es una mujer en la constante búsqueda de la paz espiritual, redescubriendo los placeres que brinda la autonomía y en constante esfuerzo por olvidar el fracaso matrimonial, y quien además se resiste a admitir el amor que aun siente por su exmarido. Sin embargo él consigue mantenerse dentro de un estado predominado por el placer y las fantasías experimentadas con Jazmín, su exuberante y bella mujer, a quien procura sin importar el alto precio que debe pagar por vivir a lado de ella. Pero no todo será miel sobre hojuelas y la expareja se verá expuesta al dialogo, para afrontar los errores de cada uno, aunque todo parezca un karma para ambos.

Comedia agridulce que retrata las consecuencias de una separación en malos términos; que escapa a la temible solemnidad y encuentra en este género algo mucho más ligero, sin perder la esencia que la propuesta ofrece, aun cuando por momentos los elementos característicos de sexy comedia (los semidesnudos de Rocío Verdejo y Octavio Burgueño, o el fallido trailer) podrían parecer robarle, centrándose de lleno en los protagonistas, en sus sentimientos, miedos, deseos, errores y complejos, personajes de carne y hueso, nada ajenos a nuestro entorno.

Desde mi punto de vista la película es lo suficientemente interesante, que pudo alcanzar mayor relevancia si se hubiesen omitido algunas incongruencias achacadas a deidades. Sin embargo y para como se encuentra el género de comedia en México, la película cumple, superando las “penosas confusiones”.

Película entretenida con su toque para abordar el machismo y las ideas incorrectas para con los longevos.

P.D.: Por cierto este año lo he denominado el año de: Blanca Guerra, actriz constante en la escena del cine mexicano y perfilándose para ser una diva dentro del mismo. ¡Felicidades!