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Bailar en la oscuridad (2000)

Bailar en la oscuridad
140 min.
7,6
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Tráiler (ESPAÑOL)
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Sinopsis
Selma, inmigrante checa y madre soltera, trabaja en la fábrica de un pueblo de los Estados Unidos. La única vía de escape a tan rutinaria vida es su pasión por la música, especialmente por las canciones y los números de baile de los musicales clásicos de Hollywood. Selma esconde un triste secreto: está perdiendo la vista, pero lo peor es que su hijo también se quedará ciego, si ella no consigue, a tiempo, el dinero suficiente para que se opere. Tercera película de la trilogía "Corazón dorado" de Lars Von Trier. (FILMAFFINITY)
Género
Drama Musical Crimen Película de culto Enfermedad Discapacidad Discapacidad visual
Dirección
Reparto
Año / País:
/ Dinamarca Dinamarca
Título original:
Dancer in the Dark
Duración
140 min.
Guion
Música
Fotografía
Compañías
Coproducción Dinamarca-Alemania-Países Bajos (Holanda)-Italia-Estados Unidos-Reino Unido-Francia-Suecia-Finlandia-Islandia-Noruega;
Grupos
Trilogía Corazón dorado
Links
Premios
2000: Premios Oscar: Nominada a mejor canción original
2000: Globos de Oro: Nominada a mejor canción y actriz - drama (Björk)
2000: Festival de Cannes: Palma de Oro, Mejor Actriz (Björk)
2000: National Board of Review: Mejor actriz dramática (Björk)
2000: Premios del Cine Europeo: Mejor película europea y actriz (Björk)
Si alguien se pregunta qué queda por hacer en el cine, o si tiene sentido hablar de cine “posmoderno”, esta película es la respuesta. Von Trier nos tenía acostumbrados a obras geniales (la estremecedora “Rompiendo las olas”, la inteligentísima “Los idiotas”), pero “Bailar en la oscuridad” son palabras mayores: Una de las obras maestras del último cine, y, para el que esto escribe, una de las mejores películas de todos los tiempos. Como lo oyen. Una inmigrante checa en Estados Unidos que se está quedando progresivamente ciega ahorra todo lo que gana para pagarle a su hijo una operación que no le aboque al mismo destino. Ella se evade del trabajo de la fábrica imaginando que su vida es un musical, cuya banda sonora son los ruidos cotidianos. Pero la tragedia acecha, y los acontecimientos se suceden inevitablemente como fichas de dominó que caen. Este guión, no muy diferente del de los peores telefilmes sobre enfermos terminales, se convierte en las manos de Von Trier en una deslumbrante obra que desborda todos los límites. Reinventa dos géneros, al fundir los edulcorados musicales de la Edad de Oro de Hollywood con el más puro melodrama, salpicado con destellos de tragedia griega; pone el estilo documental al servicio de una ficción que camina peligrosamente por el delgado filo que separa lo sublime de lo irreal; saca oro, sudor y lágrimas de la ¿interpretación? más creíble de las últimas décadas; crea unos números musicales absolutamente originales y arrebatadores; y, sobre todo, tiene el final más desolador y brutal que se ha visto jamás en el cine. Aviso: deja en estado de shock.
[FilmAffinity]
"Extraordinaria película (...) aterradora y genial (...) Desde 'Leolo' jamás me había impresionado tanto una obra de arte"
[Diario El Mundo]
12
8
Positiva
2
Neutra
2
Negativa
10
Eclipse Björk
Voy a hablar desde las tripas. No puedo hacerlo de otro modo.
Sí. Porque creo haber encontrado sobradamente todas las alabanzas técnicas y artísticas referidas hacia este film. Sí. Porque ya se ha destacado que hay un antes y un después cinematográfico después de “Bailar en la oscuridad”
Desde las tripas pues, porque me resulta muy difícil pensar en términos de planos, secuencias, iluminación, montaje, expresividad, ritmo, narración, guión... música, cuando ninguna o muy pocas historias me han noqueado con tanta virulencia. Pocas veces la música en una película ha dejado de ser tal cosa para trascender a un estado que va infinitamente más allá de la mera etiqueta de “banda sonora” o “género musical”
Björk, ese ser prodigioso que dicen que llegó de los cielos, Vino, vio y venció... lo eclipsó todo y se marchó con su magistral e inexplicable interpretación, con su música (o ese “algo más allá”) a su particular universo celeste.
Desde las tripas, porque se me hace cuesta arriba rememorar ese final sin que algo se me retuerza dentro....

.....
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215 de 262 usuarios han encontrado esta crítica útil
10
La dificultad de la lágrima.
Hace algunos años mi pandilla de facultad destacaba por cosas tan mundanas como:

1.- Vivir la vida.
2.- Experimentar sexualmente.
3.- Escuchar rock and roll.
4.- Tocar la guitarra/ bajo / batería o similares.
5.- Leer libros.
6.- Amar el cine.
7.- No ser aburrido.
8.- Reírse.
9.- No deprimirse.
10.- Vivir la vida.

Recuerdo que en una de nuestras amenas tertulias alguien mencionó en una ocasión. ¿Habéis oído hablar de esa gilipollez a la que llaman Dogma 95? Así nos enteramos de que un don nadie, al parecer danés había hecho un manifiesto cinematográfico con reglas escritas y todo, que mas o menos consistía en que usándolas se podía hacer una peli con menos presupuesto que el de nuestra paga de niños mimados universitarios. El tema del Dogma salió en más ocasiones y siempre nos echábamos unas risas a costa de aquel fracasado que empezaba además a ganar puntos entre otras pandillas de la facultad que se caracterizaban por:

1.- Tener aspecto de estar muertos
2.- Follar con condón.
3.- Escuchar a los Sugarcubes.
4.- Tocar el melotrón/ xilófono/ tuba o similares.
5.- Leer a Nietzsche.
6.- Entrar en éxtasis con El Séptimo sello, Ordet y el Decálogo de Kieslowski.
7.- Aburrirse.
8.- Tener ojeras debido a su profunda duda existencial.
9.- Deprimirse.
10.- Tener aspecto de estar muertos.

Sin embargo hace unos cuatro años por fin me decidí a dar el paso alquilando en el videoclub de mi barrio esta película. Von trier ya era un cineasta aclamadísimo pero yo seguía siendo fiel a mi estilo de vida y por supuesto a mi pandilla de facultad. Y sucedió queridos amigos. Sucedió que simple y llanamente me hizo llorar. Juro que yo no lloro con facilidad. Perjuro que no recuerdo cuando había sido la última vez que lloré viendo una película. Probablemente nunca. Y vuelvo a jurar nuevamente para decir que antes que comprarme un disco de Bjork dejaría que me depilasen las ingles con cera ardiendo. Pero amigos, cuando la peli se acabó, las lágrimas inundaban mi rostro y además mi empatía con Bjork subía y subía hasta límites tan insospechados como inauditos. Y la película en sí era tan hermosa, hipnótica, provocadora, simple, hiriente, mágica... .

Y para terminar diré que después de esto he disfrutado a Von Trier de arriba a abajo. El predogma, el dogma el posdogma, y ... ¡ Me gusta todo ¡¡¡¡¡ Maldita sea es que hasta me cae simpático ese perro dibujado con tiza ¡¡¡¡¡

P.D: Esta crítica está dedicada a Listo Comics, mi crítico favorito de Filmmaffinity, más que nada porque después de leer la suya le he dado por primera vez en el NO. Siempre hay una primera vez colega ¡¡¡¡¡¡¡

P.D 2: Años después de escribir esta crítica hube de presenciar en una sala de cine como Von Trier perpetraba una película tan abominable como La Casa de Jack. Sin ninguna virtud cinematográfica y execrable desde todos los puntos de vista. Sin ningún mensaje que ofrecer más allá de una irritante misoginia y la búsqueda de la provocación gratuita. Las escenas que incluyen niños y una muy concreta con un animal son dignas de que Von Trier analice su estado mental. Desconozco por donde tirarán sus películas en el futuro pero ha pasado a mi lista negra cinematográfica y dudo que salga de ella algún día.

https://corazonesenelprecipicio.blogspot.com
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