Amico mio, frega tu... che frego io! (1973)

Normalmente siempre encuetro algo salvable en cualquier película, por mala que sea, pero el visionado de esta patética patochada constituye un suplicio inenarrable.

Intenta tal vez, y la música da algunas pistas, parecerse un poco al tipo de humor de Benny Hill, un humor de sketches, propio de otro formatos e impropio del de la película que pretende ser.

Pero ni aún así funciona. Y lo peor es que esta infame sucesión de payasadas ni siquiera es aburrida, Es simplemente insoportable.

Fidani y su factoría tenían bastante más gracia cuando no trataban de provocarla.