Flechas sangrientas (1964)

Western de serie B, muy modesto industrialmente, aunque con intérpretes estimables, de esos que se llamaban antiguamente "secundarios".

Comienza bien, pero el problema es que está realizada por Sidney Salkow, un ilustre destajista del viejo Hollywood, que nunca sobresalió en el cine, aunque tiene alguna película entretenida que merece salvar de la quema.

Esta de ahora se sigue como quien oye llover, aunque no aburre, pero tampoco es demasiado amena. Muy convencional y sin nada destacable.

Para pasar el ratillo y a otra cosa.

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Western pasable, corriente y moliente, que incluye algunas pocas novedades, pero también con los elementos habituales, tales como acción frenética, emoción, tiroteos, cargas de caballería, drama, romance y algunas espectaculares escenas de acción. Por lo tanto la trama va avanzando con acción rápida, disparos impresionantes, duros enfrentamientos, ataques multitudinarios e inesperados giros. Prisionero de una patrulla de la Caballería de los EE. UU., el forajido Wade Cooper (Dale Robertson) es detenido y trasladado a un fuerte por la Caballería de los EE. UU. Después de sobrevivir a un ataque indio, él es el único superviviente, y resulta gravemente herido. Nancy Mailer (Martha Hyer) rescata a Wade y lo lleva al puesto comercial de su marido Clint (Wendell Corey), donde cuida al forajido hasta que recupera la salud a pesar de las objeciones de su marido, un avaro cobarde, pero luego son emboscados por los violentos Indios.


Western típico con los usuales incidentes, tiroteos, luchas, persecuciones a caballo, ataques indios y cargas de caballería. Es un western muy normalito cuya trama la hemos visto cientos de veces, tratando sobre una familia asediada por los indios y al mismo tiempo por un grupo de malvados bandidos y por supuesto un héroe ambiguo que cae en el amor y los salva para quedarse con los señora en apuros.

Esta película tiene una combinación aceptable de actuaciones decentes, conmovedor drama y atractivos exteriores. El agradable guión avanza sin piedad con emoción, un triángulo amoroso incluido entre marido, mujer y un bandido, cargas de caballería, abrumadores ataques y cambios argumentales. El director Sidney Salkow busca acción ruidosa y a veces lo consigue con un tratamiento contemporáneo sobre un forajido que obtiene el perdón general al convertirse en salvador de un hijo secuestrado. Y juntándolo con un triángulo amoroso en el que están implicados los tres papeles principales: Dale Robertson, Martha Hyer y Wendell Corey. La trama es simple y llana, una mezcla de actores funcionales con personajes de apoyo, de los cuales Dale Robertson tiene el mejor papel como el buen ladrón con muchos recursos a su alcance. Una historia cálida y, a veces, lenta, hace que la película sea aceptable, resultando en un Western propio de su tiempo al estilo B-movie. La cinta está maravillosamente ubicada en un contexto espectacular de Magma Arizona Railroad, Superior, Sonoran Desert, Superstition Mountains, Arizona, Apache Leap Mountain, Superior, Picketpost Mountain, Superior, Arizona, Ray, Cochran, Arizona y Apache Trail, Arizona. Sin embargo, la fotografía de los parques naturales no puede apreciarse bien debido a la mala, destartalada y descolorida transferencia de la película que está circulando por los diversos canales de distribución. Sólo cuando se realice una remasterización perfecta se podrán disfrutar de los maravillosos paisajes.

Igualmente, no es difícil encontrarle grietas al film; después de todo, este es uno de esos westerns por excelencia de principios de la década de 1960 que ignoraban los guiones inteligentes y se sometían a los argumentos llenos de clichés. Protagonizan Dale Robertson y Marta Hyer que dan interpretaciones decentes, pero sus días dorados ya habían pasado algunos años antes, además el primero ya está un poco mayorcito. Aquí destaca el familiar reparto secundario, que para una película de serie B está bastante bien con lleno de caras conocidas, tales como Wendell Corey, Paul Mantee, Ted de Corsia, Tom Reese y el eterno actor secundario Elisha Cook Jr. También es digno de resaltar la apasionante y conmovedora partitura musical de Richard LaSalle. La película fue dirigida mediocre pero profesionalmente por Sidney Salkow. Este era un artesano que ya había rodado otros westerns. Realizó todo tipo de géneros como rutinarios westerns (Toro Sentado, La gran masacre de los sioux, Pathfinder), Aventuras (El príncipe de los piratas ó Prince of Pirates, Sword of the avenger ó La espada del vengador), películas bélicas, Ciencia ficción (El último hombre en la Tierra, original titulo The last man on Earth), Terror (Twice-told tales ó Cuentos dos veces contados) y melodramas (City without men ó Ciudad sin hombres). Salkow trabajó por primera vez para Republic, después de unirse a Universal. En Columbia, manejó, entre otras tareas, cuatro entregas de la popular serie 'Lone Wolf'. Después de 1953, Salkow se desempeñó principalmente como director de televisión por episodios. Calificación: 5.5/10. Western mediocre y regular, pero pasable.