La bestia de la montaña (1956)

Entrañable combinación de cine fantástico, con monstruo prehistórico al fondo, y western moderno, con problemas domésticos entre ganaderos luchando por sus tierras y por el amor de una bella mujer.
La película tiene como mejor bagaje el que no peca de ambiciosa, aunque se la juegue, no en vano es ciertamente arriesgado juntar estos dos bonitos géneros en uno. El resultado, o es muy bueno, o muy malo, por regla general. Aquí es apañado, modesto en cuanto a resultados finales, pero no aburre y se pasa el rato, y a ello ayudan no poco sus escasos 80 minutos de duración, lo que le hace más digerible.
Lo mejor, es la extraordinaria fotografía, en Cinemascope, a todo color De Luxe, a cargo de Jorge Stahl Jr.
La realización, no muy imaginativa que digamos pero funcional, corre cuasi al alimón a cargo de Edward Nassour e Ismael Rodríguez (digo "cuasi" porque en los títulos de crédito iniciales el nombre de Ismael Rodríguez aparece un poco más pequeñito que el de Nassour...).
Es una producción Nassour hermanos (!ah, por esto es lo del tamaño de los títulos de créditos antes mencionados!) y el diseño del monstruo (sale el último cuarto de hora y resulta hasta chistoso el pobre) es obra de la propia productora y se llama Regiscope.
Desconozco si hubo otros filmes que utilizaron este sistema que la verdad es que no queda demasiado bien pantalla, sobre todo la lengua del susodicho monstruito de marras.
En definitiva, que es curiosa y no es tediosa, sobre todo porque las imágenes, si se ven a toda pantalla, quedan majestuosas. Otra cosa es lo que se cuenta, que si se cuenta como un pasatiempo curioso queda ameno pero que si se la toma en serio...

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