- Sinopsis
- El éxito de 'La otra madre' ('Visages d´enfants', 1923), dirigida por Jacques Feyder, motivó que le ofreciesen la adaptación al cine de la novela -de tintes autobiográficos- de Jules Renard 'Pelo de zanahoria' o 'Zanahorio', que también se tradujo así en España. Feyder escribió un guión que no se llegó a producir y otra empresa le propuso el reto a Julien Duvivier, quien desarrolló su propio guión. El film de Duvivier es tan cruel y emotivo como el libro, y narra la desgraciada infancia de un niño maltratado por su madre hasta el punto de tratar de suicidarse en dos ocasiones. (FILMAFFINITY)
- Género
- Drama Cine mudo Infancia Familia
- Dirección
- Reparto
- Año / País:
- 1925 /
Francia - Título original:
- Poil de carotte
- Duración
- 108 min.
- Guion
- Fotografía
- (B&W)
- Links
Family matters
25 de mayo de 2019
La película parece ser que está basada en una historia autobiográfica del autor francés Jules Renard.
El relato está divido en cortos espisodios en los que se muestra la vida de la familia Lepic, en un ambiente rural y montañoso. Particularmente, se fija en Pelo de Zanahoria, uno de los hijos del matrimonio que debido a su color de pelo es objeto contínuo de los malos modos de su madre, de tal forma que durante buena parte de la película vemos como le reprende sus acciones, se burla de su aspecto y de su inteligencia, o directamente conspira para culparle de situaciones ajenas. A parte de esto, también cuenta alguna otra historia en paralelo de los amoríos del hijo mayor o de la vida del padre en el pueblo.
El argumento no es muy brillante, y los personajes son en general bastante arquetípicos y planos. La madre, que físicamente llama la atención por su principio de mostacho, tiene un comportamiento realmente mezquino, favoreciendo a su hijo mayor. El padre, por contra, es un ser juicioso, cabal, reflexivo y compasivo, que tampoco tiene una buena opinión de su mujer.
La visión general del género femenino en su etapa adulta no sale muy bien parada. Pasan gran parte de su tiempo pendientes de los chismes y cotilleos, y tienen una desmedida ambición por el dinero, mientras que los hombres se afanan por complacerlas. No parece que el mensaje feminista hubiese calado en los tiempos en los que se escribió la historia y se grabó la cinta, y tampoco parece que estubiesen sometidos a la atadura de lo políticamente correcto. Se aprecia igualmente en la cinta cierta crítica al mundo del chismorreo con grado mojigato.
Es una película de 1 hora y 40 minutos que bien se podría haber resumido en media hora menos, pero no resulta del todo muy pesada. Lamentablemente, después del primer visionado no creo que valga la pena un segundo, es más, a decir verdad, tampoco hubiera perdido nada si no la hubiese visto. Lo que cuenta es de poca enjundia, aunque sea objeto de curiosidad para los aficionados al cine mudo.
El relato está divido en cortos espisodios en los que se muestra la vida de la familia Lepic, en un ambiente rural y montañoso. Particularmente, se fija en Pelo de Zanahoria, uno de los hijos del matrimonio que debido a su color de pelo es objeto contínuo de los malos modos de su madre, de tal forma que durante buena parte de la película vemos como le reprende sus acciones, se burla de su aspecto y de su inteligencia, o directamente conspira para culparle de situaciones ajenas. A parte de esto, también cuenta alguna otra historia en paralelo de los amoríos del hijo mayor o de la vida del padre en el pueblo.
El argumento no es muy brillante, y los personajes son en general bastante arquetípicos y planos. La madre, que físicamente llama la atención por su principio de mostacho, tiene un comportamiento realmente mezquino, favoreciendo a su hijo mayor. El padre, por contra, es un ser juicioso, cabal, reflexivo y compasivo, que tampoco tiene una buena opinión de su mujer.
La visión general del género femenino en su etapa adulta no sale muy bien parada. Pasan gran parte de su tiempo pendientes de los chismes y cotilleos, y tienen una desmedida ambición por el dinero, mientras que los hombres se afanan por complacerlas. No parece que el mensaje feminista hubiese calado en los tiempos en los que se escribió la historia y se grabó la cinta, y tampoco parece que estubiesen sometidos a la atadura de lo políticamente correcto. Se aprecia igualmente en la cinta cierta crítica al mundo del chismorreo con grado mojigato.
Es una película de 1 hora y 40 minutos que bien se podría haber resumido en media hora menos, pero no resulta del todo muy pesada. Lamentablemente, después del primer visionado no creo que valga la pena un segundo, es más, a decir verdad, tampoco hubiera perdido nada si no la hubiese visto. Lo que cuenta es de poca enjundia, aunque sea objeto de curiosidad para los aficionados al cine mudo.
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