Ojos que no ven (2003)

Un canal de televisión divulgó unas grabaciones en donde el jefe del Servicio de Inteligencia de la Republica del Perú y asesor del presidente, se le grabó sobornando a algunos de los dirigentes del país de altos cargos.

La difusión de ese primer vídeo generó un escándalo público que propició la caída del régimen y el descubrimiento de una red de corrupción que alcanzaba dimensiones jamás vistas.

La película cuenta seis historias de diversa duración entrelazadas por vínculos laborales, familiares, de contexto social o políticos. Los personajes corresponden a distintas clases sociales y a diversas edades.

Seis historias ambientadas en los días en que aparecieron los llamados "vladi-videos", en los que se veía al asesor presidencial Vladimiro Montesinos sobornando a funcionarios de altos cargos de la nación y que provocaron la caída del régimen del Presidente Alberto Fujimori.

La película ofrece indicios de lo que se grabó en vídeo (corrupción, manipulación, etc.), es un verdadero reflejo de la sociedad. Las mentiras, el engaño por la supervivencia, las trampas, la aceptación y el cumplimiento de las órdenes, y el silencio frente al poder, son características que condicionan el comportamiento.

Las seis historias desarrollan esta idea; la información documentada e histórica, aparentemente no relacionada con la vida diaria con las personas comunes, tiene repercusiones y consecuencias.

El film participo en cuatro festivales de cine, ganando en dos de ellos, “Festival International des Cinémas et Cultures Latino-Américaines de Biarritz , France” (Premio Sol de Oro), “Festival Internacional de Cine y T.V. de Cartagena , Colombia”, “Festival Internacional de Cine de Donostia - San Sebastián, España” y el “Festival Internacional de Cine de Valdivia, Chile” (Premio Mejor Película).

Alberto Fujimori ocupó la Presidencia de la República del Perú entre el 28 de julio de 1990 y el 21 de noviembre de 2000. En los últimos meses del año 2000, Fujimori se vio acorralado por los escándalos, viajó a Japón, lugar desde donde dimitió a los pocos días. Fue, sin embargo, destituido por "permanente incapacidad moral" por el Congreso.

El 7 de abril de 2009, Fujimori fue sentenciado a 25 años de prisión en orden a los delitos de asesinatos con alevosía, secuestro agravado y lesiones graves, tras ser hallado culpable de ser el autor intelectual de las matanzas de Barrios Altos, en 1991, y La Cantuta, en 1992, cometidas por un escuadrón del ejército conocido como el grupo Colina, así como del secuestro de un empresario y un periodista.

Previamente, Fujimori ya había sido encontrado culpable por el ilegal allanamiento de la casa de Vladimiro Montesinos y condenado a 6 años de privación de la libertad. En la actualidad, aún cuenta con la simpatía de un sector de la población del Perú y con una bancada de 13 miembros en el Parlamento Unicameral.