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La mujer de esa noche (1930)

La mujer de esa noche
65 min.
6,7
144
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Película completa (JAPONÉS con subtítulos en INGLÉS)
Sinopsis
Un matrimonio que vive en una situación de pobreza extrema tiene una hija gravemente enferma. La situación es tal que el hombre no encuentra más salida que la delincuencia. El policía que consigue arrestarlo acabará planteándose un delicado dilema moral. (FILMAFFINITY)
Género
Drama Pobreza Familia Crimen Enfermedad Cine mudo
Dirección
Reparto
Año / País:
/ Japón Japón
Título original:
Sono yo no tsuma (That Night's Wife)
Duración
65 min.
Guion
Fotografía
Compañías
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8
Los rostros de la miseria
Es una lástima que no se conservara buena parte de las películas mudas de Yasujiro Ozu. Muy prolífico durante la carencia del sonido en el cine, prolongó esa etapa en sus trabajos hasta 1935. También tardó en adoptar el color, manteniéndose leal al blanco y negro cuando en otros países el Technicolor ya hacía furor.
Le costaba asimilar los adelantos y conservó durante toda su carrera un estilo tradicionalista, de cámara básicamente quieta y a la altura de una persona sentada en un tatami, escenarios minuciosamente y armoniosamente planificados y dispuestos, y actores no histriónicos, de maneras contenidas pero expresivas.
Por fortuna, “La mujer de esa noche” ha llegado hasta nuestros días, un film de sesenta y cinco minutos de duración que se sirve de intertítulos. Este Ozu de veintisiete años era más audaz en su realización, y se nota en esa cámara más móvil, en los travellings y el objetivo que avanza para dirigir la atención a ciertos detalles. Las imágenes son mucho menos estáticas de lo que lo serían en obras posteriores, y además tanto el desarrollo narrativo como la forma de proceder de los personajes son más espontáneos.
El hilo argumental es la pobreza extrema de una pequeña familia con una hijita gravemente enferma. Habitan en un apartamento destartalado, curiosamente decorado con carteles que anuncian estrenos de Broadway y hacen propaganda de estrellas del momento, como Walter Huston, padre de John Huston y abuelo de Angelica Huston. Esa llamativa ornamentación, que no puede tapar la miseria del habitáculo, actúa de fondo para la desesperación de unos padres que se desviven por la niña postrada en cama. El padre, no viendo otro recurso, se ha lanzado a la noche para robar algún dinero con el que mejorar la crítica situación, mientras la madre se queda velando junto al lecho. A punta de pistola, el pobre desgraciado consigue sustraer unos cuantos billetes a unos empleados, y después huye, perseguido por la policía. Logra burlarlos, pero un agente, haciéndose pasar por taxista, lo lleva a su casa, y entra en el apartamento para llevarse al delincuente. La escena de abnegación del matrimonio cuidando a la pequeña, que está pasando sus peores horas, confunde y enternece al agente, que se debate entre el deber y la compasión.
Ozu apuntaba ya sus maneras de genio en esta película corta y conmovedora, que se disfruta maravillosamente sin la menor adición de música, la primera de estas características que he visto sin restauraciones con añadidos posteriores de banda sonora. Y lo cierto es que no la necesita.
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11 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
8
El precio del delito, de la pobreza, de la redención
Un hombre corre por las calles en plena noche tras haber cometido un robo a un banco. A ojos de la ley es un ladrón común que debe pagar con severidad el precio de su delito.
Sin embargo este acto oculta una verdad desgarradora, la de la terrible enfermedad de una niña y la de una familia sumida en la más profunda de las miserias...

La carrera de un cineasta clásico tiende a dividirse en etapas por circunstancias creativas o que escapan a su control como el exilio a otro país, fuertes cambios sociales y demás; Alfred Hitchcock vivió sus etapas, y Fritz Lang, e Ingmar Bergman, y por supuesto Yasujiro Ozu, pues la filmografía del maestro nipón consta de dos partes bien distintas: la anterior a la 2.ª Guerra Mundial y la posterior, y entre ellas se aprecian muy bien las diferencias. Los años '30 comienzan en Japón con una grave crisis económica, revueltas de grupos que predican el pensamiento ultranacionalista y reinando la censura en los distintos medios de expresión.
El cine es uno de estos medios, donde se mantiene el interés y el gusto por el llegado del extranjero, sobre todo el americano, y se dan los primeros pasos hacia el sonoro, aunque los problemas económicos y las amenazas de los narradores benshis retrasa su generalización. Ozu ha ascendido a director en los estudios Shochiku, donde se realizan muchos melodramas centrados en la situación social y la generación del momento (algo en lo que éste destaca gracias a "Días de Juventud" y las casi hermanas "Daigaku wa Deta, keredo..." y "Rakudai wa Shita, keredo...").

El presidente de la productora, Shiro Kido, se siente satisfecho con él y le ofrece un proyecto más serio y distinto de lo que hasta entonces ha hecho. Se trata de "Caminad con Optimismo", quizás su primera incursión en el cine negro. Ese mismo año volverá al género adaptando el relato "From 9:00 to 9:00" del autor de origen ruso Oscar Schisgall, inmerso en un ambiente dramático y de suspense. Aquellos que sólo hayan conocido al Ozu de su último periodo de ninguna manera lo distinguirán en los primeros minutos del film, que arranca entre calles oscuras y oficinas de policías al más puro estilo "noir" americano, y para corroborar esto un atraco a un banco mostrado por la cámara con audacia y nervio.
El director se regocija en el frenesí de los travellings, en la emoción de la huida y la persecución entre las sombras y usa el plano detalle para subrayar los sentimientos y las pistas en las que se apoya la intriga. Así, una huella en un cristal, un teléfono descolgado en una cabina, un paquete de cigarrillos tirado en mal sitio, una pistola al descubierto, todo ello contribuye a crear el suspense y la tensión propios de un ambiente de trazos "hitchcockianos"; sin embargo el nipón nos ha engañado, pues este delito no forma parte de una trama criminal de inclinaciones "hard-boiled", sino que está perpetrado debido a una delicada situación, la de una familia hundida en la pobreza cuya hija está gravemente enferma.

El resorte del atraco es, por tanto, la precariedad, la inevitable necesidad y el sacrificio paterno se erige como tema central de la historia (detallado en Zona Spoiler). Ozu filma ni más ni menos que a seres humanos en la máxima expresión de la humildad, sujetos y resignados a su condición, y sin perseguir grandes objetivos, tan sólo el poder sobrevivir un día más al cuidado de la familia. Su mirada desnuda la película de toda inclinación al género popular, pues se muestra la realidad en su más honesta, melancólica, sucia, desgarradora e injusta forma, algo que el realizador siempre mantendrá en su cine, aunque decantado hacia una mayor exquisitez formal.
Finalmente la bondad, la abnegación y el deber perfilan la lección moral en un gesto trágico pero comprensible. Mientras Tokihiko Okada y Togo Yamamoto (como ese duro detective al estilo americano) se muestran correctos aun con sus limitaciones artísticas, la magnífica Emiko Yagumo (que ya dejó patente sus habilidades para el drama en "Fue no Shiratama") sobresale entre ellos, no sólo por ser la única mujer del reparto, sino por esa capacidad innata que posee para transmitir todo un crisol de intensas emociones con un gesto o una expresión; junto a ellos dos actores fetiches de Ozu en breves apariciones: Chishu Ryu y Tatsuo Saito.

El director daría un paso importante en su primer periodo a través de este duro drama social adornado con pinceladas de cine negro (pese a que ya probó con él en "Caminad con Optimismo", su conclusión era demasiado optimista, como indica su título) impregnado del espíritu de Frank Capra, Josef Von Sternberg, Mervyn LeRoy o el Howard Hawks primerizo, fuertes referencias para él.
De algún modo su trabajo cambia, evoluciona y tiende, paulatinamente, a volverse más pesimista con el tiempo, además de seguir nutriéndose de géneros extranjeros ("He Nacido, pero..." y "Hijosen no Onna" serán los mejores ejemplos).
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1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
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