¿Soy linda? (1998)

Entreteje bien multiples personajes con sus anhelos, sin juzgar a nadie, los personajes están a merced de sus vicisitudes que sienten como zarandeos graves, como un de stino que no se resuelve, -qué si no es la vida- y en un pais y en otro, en alemania y en españa, al final se mezclan las tramas, que como se puede imaginar son de sentimientos. Llena de detalles de color, de respeto por ambas tierras, de preguntas sobre la vida pero que están implícitas en la poesía y en las miradas, en las vicisitudes en las que seguro que todos nos podemos reflejar.
Sabe ademas auscultar el pensamiento de los personajes que a veces no tiene mucho que ver con lo que hacen, el cerebro va por su cuenta.
No hay tesis en la pelicula, salvo la del amor y el tiempo. Ello no significa que se pierda, al contrario,está bien construida y llevada. Muy buena pelicula. La pondría de algun modo en la linea de las de viajes honestos porque interiorizados, como "exils", "le grand voyage", u otras hechas entre alemania y estambul. Suelen ser viajes al Sur, donde la sensualidad se casa con el alma.

Sorprendente y desconocida película alemana la que nos trae la para mí desde hoy mismo admirada y seguida Doris Dörrie. Lo que la directora alemana ha hecho con este film es un verdadero y sentido homenaje a nuestro país y, en especial, a mi tierra, Andalucía. Casi toda la acción transcurre en tierras andaluzas, sirviendo Sevilla de eje central de la misma y ofreciendo ahora que precisamente estamos finalizando esas fiestas, una imagen de nuestra Semana Santa a la que finalmente todos los personajes de la película acaban entregados. Las calles del centro de la ciudad andaluza sirven de marco para alguna de las escenas más destacadas del film y los pasos marianos se mezclan con los actores en esta rara mezcla de lo andaluz con lo germano. Quizás me moleste el manido estereotipo en el que siguen cayendo los extranjeros al mostrar nuestro país, demasiado flamenco y demasiadas sevillanas, esas carreteras con nuestro toro de Osborne presidiendo las autovías, ese calor inaguantable del paraje andaluz como si de un desierto se tratara, pero todo ello se lo perdono a Dörrie porque nos ha tratado en su film con tanto amor y respeto que se le puede pasar por alto. Espléndido el elenco de actores y, sobre todo, de actrices que aparecen aquí reunidas. Franka Potente es, sin duda, la más conocida para mí, actriz que ya cuenta con una amplia trayectoria cinematográfica en Hollywood que le permite ser reconocida por el público internacional. La alemana vuelve a estar más que correcta. Pero junto a ella aparecen unas desconocidas actrices alemanas que me han gustado muchísimo, sinceramente no sabría con cuál de ellas quedarme. Tenemos a la actriz de orígen serbio, Anica Dobra, quién interpreta a una chica dispuesta a casarse con un hombre al que no ama. Tenemos a Iris Berbe, cocinera insegura de sí misma, tenemos a la veterana actriz de orígen austríaco Senta Berger, con una elegancia y una presencia en pantalla verdaderamente poderosa, quizás sea ella la que más me ha impactado de todas. Tenemos a Heike Makatsch quién también nos deja una correcta actuación. En el lado masculino destacaría al guapo Steffen Wink, de gran parecido físico con John Bon Jovi. Increíble la habilidad de la directora, que también participa en el guión, para enlazar unas historias con otras y hacer que todos los personajes estén relacionados de alguna u otra manera al final de la película. A mí me ha encantado. No se pierdan a Franka Potente cantándole una saeta en alemán a una de las imágenes que salen en la Semana Santa sevillana. Juan Diego Botto, representando al cine español, tiene un pequeño papel y de banda sonora podemos escuchar a la cantaora de flamenco Fernanda de Utrera y al guitarrista Tomatito. Película muy especial, merece la pena.