The Waterboy (El aguador) (1999)

Comedia americana al uso. Construída a base de gags, algunos increíblemente buenos. Hay que estar, incluso, atento a los diálogos, porque en algunos momentos puntuales tienen toques brutalmente graciosos.

Es sólo una comedia más para pasar el rato, sin argumento, sin actuaciones, sin sentido,... pero divertida. No esperes nada bueno de lella y te divertirás.

Como ya he repetido muchas veces no me considero un gran fan de Adam Sandler pero soy un chico que soporta sus películas y las aguanta de manera que no voy buscando fallos constantemente y disfruto de la película sin altas o bajas pretensiones sino en un término intermedio sin saber con lo que me voy a encontrar. Esta película no es que sea de las mejores ni de las peores, simplemente es, como la mayoría de las películas de Adam Sandler, interesantes y entretenidas como lo son Mas allá de los sueños, Os declaro marido y marido y Mr.Deeds. Respecto a su actuación no hay mucho que reprochar, como en el 80% de sus películas, sobreactúa de manera constante y con razón siempre va a los Razzie pero esta vez es algo lógico, su personaje es muy parecido a Burbuja (ese personajillo cariñoso de la serie El Barco) tartamudeando y sin personalidad alguna nada más que dependiendo de su madre y de sus órdenes, de una madre interpretada por la brillante Kathy Bates que cumple con su personaje de manera carismática y divertida. El resto de personajes secundarios tiene su momento de gloria, hasta un mísero cameo de Rob Schneider alegra la cara con su lema constante y repetitivo durante el tramo final de la película o mismamente la fórmula que repite el entrenador de Sandler que sorprende a mas de uno al final de la cinta.
El guión es original por un lado pero su base es tópica y previsible a mas no poder. Pese a que el tema del deporte se trata mucho, no se ha tratado el tema de los aguadores, es más, ¿Cuántas veces se trata el tema del agua sabiendo que es un elemento fundamental en nuestra vida?, en ese aspecto la valoro de forma positiva porque hay hasta guiños tan divertidos como cuando Sandler se levanta tras un buen trago de agua como si fuera Popeye recuperando energías. Sus personajes son tópicos, el romance entre Sandler y Balk o el previsible final además del tópico de mostrarnos siempre la misma historia de un héroe arrepentido que vuelve a jugar y llega tarde al partido. La banda sonora y la fotografía no destaca y en los aspectos humorísticos no brilla mucho aunque se deja ver como momentos memorables como el primer día de clase con el profesor hablando de temas sobre los cocodrilos.
En fín, una comedia mas para la filmografía de Adam Sandler que la catalogo como interesante y entretenida como un buen puñado de cintas que hace y ni la considero ni buena ni mala sino del montón. Aún así es altamente aceptable.