Cunningham (2019)

*Comienzos artísticos de Merce Cunningham

Coincidiendo con el centenario de su nacimiento el documental muestra la evolución artística del innovador bailarín estadounidense Merce Cunninghan. Desde su comienzo como bailarín en Nueva York en 1944 hasta su trabajo como visionario coreógrafo.

Coproducción de Alemania, Francia y EEUU dirigida por Alla Kovgan con duración de 93 minutos y presentada con éxito en el Festival de Toronto.

Tras una apertura con visión cenital del skyline de Nueva York nos muestra unos bailarines sobre una gran azotea hablándonos el propio protagonista sobre sus comienzos como bailarín. “Soy bailarín, eso es suficiente para mí” y “Todo movimiento es compatible con el baile” son algunas de sus interesantes revelaciones.

Con una amplia recogida de material audiovisual de archivo nos describe su formación inicial como bailarín y la creación de su propio método. Se entrega al baile adaptando su vivienda y vida para su desarrollo a través de la consecución de un cuerpo flexible para llegar al éxtasis en la danza.

La cuidada fotografía acompaña grabaciones de sus comienzos en Seattle y su encuentro como alumno con el conocido compositor musical John Cage. Así iniciarían muy poco tiempo después en 1942 una larga relación más allá de la colaboración artística. Fructífera relación de dos grandes innovadores de la danza alternativa y la música experimental.

Sus voces en off nos aportan sus reflexiones personales de tan fecunda colaboración en la elaboración de creativas coreografías que hoy día siguen siendo modernas. El detallado trabajo documental va recogiendo testimonios diversos como los de su médico personal y bailarines de su Compañía.

*Coreografías de gran calidad plástica

A continuación el documental intercala reflexiones personales de Cunningham sobre la danza, la música y las coreografías con opiniones de bailarinas y bailarines sobre su faceta formadora.

También resulta muy interesante la recopilación y reproducción que hace Alla Kovgan de grabaciones o puestas en escena de algunas coreografías destacadas de Merce Cunningham.

El documental completa y nos muestra bellísimos números de danza de su muy larga trayectoria artística. El esteticismo de algunos de ellos es por sí sólo merecedor para recomendar su visión.

“Antic Meet”, “Summerspace”, “Rune”, “Winterbranch”, “Rain Forest”, “Tread” y “Second hand” son algunas de las mejores coreografías destacadas del documental. La gran fotografía de Mkrtich Malkhasyan y la dirección musical de Volker Bertelmann hacen muy atractivo recrearse en ellas.

Especialmente bella es “Summerspace” de finísima y delicada realización donde el conocido pintor Robert Rauschenberg diseñó vestuario y fondos “puntillistas”. El complemento de la música sintética de Morton Feldman hace que sea extraordinariamente visual y esteticista.

También es un acierto del documental elegir la coreografía “Rain Forest” con música de David Tudor y trajes diseñados por el pintor Jasper Johns. Bella plásticamente con los conocidos almohadones plateados flotantes como nubes del polifacético Andy Warhol.

Resultan especialmente variados sus números coreográficos filmados tanto en interiores como en espacios abiertos naturales. Rodado el documental en Nueva York y en Alemania cuenta con la dirección coreográfica de Jennifer Goggans para la puesta en escena.

*Recorrido documental de la Cunningham Company

Otra parte muy importante es el espacio dedicado a la faceta formativa que desarrolló Cunningham con sus propios bailarines al estar en desacuerdo con la académica tradicional. Precisamente por ello amplía su carrera artística creando en 1953 su conocida Merce Cunningham Dance Company todavía en funcionamiento.

Cunningham también recoge en su metraje algunas actuaciones de sus giras artísticas por los diferentes continentes. El guion de Alla Kovgan se muestra objetivo mostrando la incomprensión y rechazo que recibió de parte del público especialmente al comienzo.

Fue alumno de la gran Martha Graham de quien fue bailarín destacado en su compañía de 1939 a 1945. Después iniciaría su carrera individual antes de formar su propia compañía.

Especialmente importante es la gira mundial de 1964 por la que durante muchos meses la compañía recorrió grandes escenarios desde Estrasburgo hasta Tokio. Actuaron en España varias veces, la última en el Festival Internacional de Danza en 2009 con su trabajo “Nearly Ninety”. Éste fue estrenado ese mismo año en Nueva York para celebrar su 90 cumpleaños pocos meses antes de fallecer.

Cunningham es muy ameno por su amplia utilización de archivos visuales y sonoros de muy diversas fuentes como recogen sus créditos finales.

Otra gran aportación de Cunningham muestra la evolución natural de la Compañía de Danza de Merce C. desde su constitución. En sus comienzos sus componentes eran de edades parecidas pero con los años hubo algunas bajas y nuevas incorporaciones.

A principios de la década de los 70 varios de los miembros fundadores se fueron, determinando el final de una era y el comienzo de otra en la compañía.

El documental vuelve a la escena de apertura con una plástica visión cenital que nos cierra el alfa y omega de la fructífera e innovadora trayectoria artística de Cunningham.

*Conclusión

Alla Kovgan nos ofrece en su documental Cunningham un completo y muy interesante recorrido por la trayectoria vital y artística de una gran leyenda de la danza moderna.

Muy recomendable no sólo para aficionados a la danza sino también para cualquier persona con sensibilidad estética, visual y sonora. Espectáculo completo que nos amplía o descubre a éste influyente gran bailarín y coreógrafo. Innovador hasta sus últimos años al acercar las nuevas tecnologías a la danza con el programa para ordenador Danceforms y las nuevas corrientes de música.

Escrito por Fernando Gálligo Estévez

Haciéndolo coincidir con el centenario del nacimiento del bailarín neoyorquino Merce Cunningham (1919-2009) y después de siete años de preparación la novel cineasta Alla Kovgan se estrena con un documental donde "explica" al artista básicamente a través de su obra y navega someramente, apenas nada, sobre su vida personal. No es una hagiografía ni un biopic al uso. Es una puesta en escena actualizada y brillante sobre un puñado de coreografías emblemáticas de su carrera y su legado para la danza contemporánea siguiendo la propia filosofía del propio Cunningham de no explicar nada sino hacerlo.

Aprendemos, vemos y disfrutamos de un trabajo que explora los movimientos humanos, da valor a la individualidad de cada bailarín ("sé tu mismo") minimaliza los espacios de la mano del artista visual Robert Rauschenberg y libera, y quizás esto es lo más importante a la danza de la música, aunque esta permanezca presente de forma incidental, casi siempre de la mano de las composiciones de John Cage su socio y pareja durante buena parte de su carrera. Criticado e incomprendido como todos aquellos que ponen patas arriba y nunca mejor dicho, lo establecido, las vanguardias neoyorquinas de la época, entre ellos Andy Warhol se prestaron rápidamente a colaborar con él.

Alla Kovgan rueda en 3D las recreaciones de sus coreografías centradas en las tres décadas que van del 42 al 72 con los últimos bailarines formados en su compañía que creo cerró en 2011 bajo la dirección de Jennifer Goggans, ubicándolas en espacios alemanes muy evocadores. El resultado es puro arte cinematográfico al servicio de la danza, lo suficientemente equilibrado para que pueda interesar a todo tipo de públicos, desde el experto al colegial pasando por aquellos que solo se mueven al cambiar de postura en el sillón. Otra cosa es que el estilo de Cunningham guste o no a cada cual. Nos escatima Kovgan el tramo final de su carrera donde experimentó con las nuevas tecnologías. En el 2000 estrenó "Interscape" en la que volvió a colaborar con Rauschenberg (1925-2008) con música una vez más de John Cage que falleció en el 92. 

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