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La isla de las vírgenes ardientes (1977)

Sinopsis
Walter y Paul, un pescador de perlas, se asocian para adueñarse de los lingotes de oro que transportaba un barco hundido. Yamato, un oficial japonés que ha sobrevivido al naufragio lleva más de treinta años en el lugar; no sabe que la guerra ha terminado y está dispuesto a rescatar el tesoro del Emperador. A Yamato lo apoyan tres muchachas que arribaron a la isla cuando eran niñas y han olvidado la existencia del mundo civilizado. (FILMAFFINITY)
Género
Aventuras
Dirección
Reparto
Año / País:
/ España España
Título original:
La isla de las vírgenes ardientes
Duración
88 min.
Guion
Fotografía
Compañías
5
Tan curiosa como digna y hasta simpática
Es esta una 'explotaition movie' tan ignota como curiosa, digna y hasta simpática. Dirigida por el esforzado Miguel Iglesias en plena fiebre del 'cine S', conjuga erotismo y aventuras de modo bastante aceptable, siendo lo más destacado el protagonismo de José Riesgo (el quiosquero de "Barrio Sésamo") encarnando a Yamato, un oficial japonés que ha permanecido ajeno al final e la Segunda Guerra Mundial en una olvidada isla del Pacífico durante 30 años.

Durante ese tiempo, Yamato también habría rescatado de un accidente aéreo a tres niñas para las que ha sido una especie de padre y a las que ha educado en las artes marciales y en la filosofía oriental pensando que habrá que defenderse en cuanto el enemigo vuelva. Pero ya son unas mujeres y cada vez va siendo más difícil para él educarlas. Y pronto la burbuja en que viven será rota por una expedición en busca del tesoro de un buque japonés hundido...

El filme cuenta también con la siempre grata presencia del ubicuo Luis Induni o de otro habitual en el cine de género, Antonio Molino Rojo, además de la de las tres bellas actrices que encarnan a las muchachas. Sorprende que no tuvieron mucho más recorrido profesional, ya que, además de lucir su bonito cuerpo en topless en muchas escenas, no lo hacen mal como intérpretes.

Lo cierto es que la cinta no aburre en absoluto: hay acción desde el minuto 1 y bastantes rasgos de humor, como en la secuencia de presentación de Induni y Enciso, que deviene en una pelea en un garito que parece un homenaje a las de "La Taberna del Irlandés" (John Ford, 1963). Y junto a alguna escena lésbica de tono 'soft-core' no faltará en el tramo final la violencia (y también la violencia sexual) expuesta de modo bastante descarnado.

En suma, una curiosa rareza sin demasiadas pretensiones. Pero con alicientes si a uno le gusta este tipo de cine de subgéneros un poco en los márgenes.
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1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
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