arrow

Sazen Tange and the Pot Worth a Million Ryo (1935)

Sazen Tange and the Pot Worth a Million Ryo
92 min.
7,2
144
Votar
Plugin no soportado
Añadir a listas
Sinopsis
Se habla de una vieja vasija con aspecto pobre que contiene un mapa indicando el lugar donde se oculta el tesoro de un millón de ryo. Desconocedor de este secreto, el hijo mayor de los Yagyu la regala a su hermano menor, creyéndola una baratija, y este a su vez la vende a unos chatarreros. Una serie de casualidades llevarán la vasija a manos de Yasu, un chico pequeño cuyo padre ha sido asesinado. Será Tange Sazen quien le de asilo en su casa, donde cuidará de él. (FILMAFFINITY)
Género
Comedia Japón feudal
Dirección
Reparto
Año / País:
/ Japón Japón
Título original:
Tange Sazen yowa: Hyakuman ryo no tsubo
Duración
92 min.
Guion
Música
Fotografía
Compañías
Links
6
Daruma
Tange Sazen es, con permiso de Zatoichi, uno de los personajes de ficción más famosos de Japón. Y como el espadachín ciego, han sido muchas las adaptaciones al cine de las historias que por entregas iban apareciendo sobre este samurái tullido y tuerto.

Un personaje nihilista y lisiado viene como anillo al dedo a un director como Yamanaka, que ya había usado con anterioridad como héroe, a personajes desfavorecidos, de castas bajas y con impedimentos físicos (en Priest of Darkness, el héroe en cuestión era cojo). Burlando la solemnidad del propio personaje, Yamanaka cuenta con Denjiro Okochi, actor que encarnó por primera vez a Tange Sazen bajo las órdenes de Daisuke Itô en una serie de películas más fieles a las aventuras literarias*. Yamanaka realiza una especie de parodia al presentar al héroe bajo la sátira, llegando a momentos de sarcasmo exacerbado.

Desafortunadamente, de la escasa filmografía editada, Tange Sazen es la película con menor entereza. Quedan desfasados ciertos recursos que son más próximos al cine silente, como el abuso de las cortinillas a la hora de encadenar escenas, o el uso que Yanamaka da a la música que casi nunca es acertada excepto en las escenas con el samisen dentro del cuadro.

Podemos apreciar ciertos momentos de gran calidad, como el asesinato de Shichibei fuera del cuadro o el uso alegórico que el director usa con los diferentes amuletos japoneses (engimono): el maneki-neko (el gato de bienvenida que ofrece prosperidad y felicidad) es sustituido tras un arrebato de violencia de Tange Sazen por el Fukuro (el búho del que se dice que traerá buena suerte si se escucha su canto) justo después de que la señora toque una canción. Los propios amuletos que reparten en el negocio si se acierta tres dianas, se parecen mucho a los Daruma, amuletos que vienen con un solo ojo para que pintes el segundo en el momento de ver cumplido el deseo que pediste cuando te obsequiaron con el Daruma (una clara referencia al personaje de Tange Sazen).

Lo cierto es que al final me queda la sensación que el tono desenfadado de Yamanaka repercute negativamente en la película, y que en posteriores obras, el autor consigue mayor equilibrio, acentuando el carácter de cada personaje con el uso de los planos.


* Samanosuke Tange es atacado y mutilados por culpa de una traición, como consecuencia pierde su ojo derecho, y el brazo derecho. En adelante, comienza a vivir como un nihilista ronin, utilizando el seudónimo Sazen, con la cara marcada por una enorme cicatriz que le cierra el ojo lesionado.
[Leer más +]
11 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
Relaciones 1
Más información sobre Sazen Tange and the Pot Worth a Million Ryo
Fichas más visitadas