Novios último modelo (Elopement) (1951)

Una familia unida expande el camino para la paz del mundo. Padres, hijos y hermanos tratándose con respeto, tolerancia y amor, solidifican el arte de las relaciones y hacen que la convivencia en sociedad sea más grata para todos. Lo que no se logra al interior de la familia se ha perdido para la humanidad entera. Y la paz que no se logra con los que llevan tu sangre, hará que el resto de tu vida sea una mera apariencia.

El día de su graduación, Jacqueline Osborne, decide truncar las esperanzas de su padre, el diseñador industrial Howard Osborne, y cuando todos creen que duerme en su cuarto, ella emprende la fuga con el profesor de psicología Matt Reagan. Pronto, avisados por el padrino de Jake, el único al que ella ha contado sus planes, los padres de ambos muchachos, con sus respectivas familias, salen en su búsqueda temiendo que puedan correr algún peligro… o que quizás hagan “algo” que traicione las buenas costumbres. Motivo éste para que las dos familias, que no se miran con buenos ojos, terminen viajando en el mismo auto con la gran oportunidad de conocerse un poco mejor.

Segunda de tres películas que, de manera sucesiva, hicieron juntos el director Henry Koster y el estupendo comediante Clifton Webb, pues tras su encuentro en “El genio se divierte”, entonaron tan bien sus notas que hicieron “NOVIOS ÚLTIMO MODELO”, y terminaron con “La marcha triunfal” para rendirle culto a la música patria.

En “NOVIOS…” Webb vuelve a sus andadas y representa a un padre de familia elegante, culto, socarrón, y con aires de tipo infalible en cualquier toma de decisiones… pero ¡nadie es tan falible como los que pretenden saberlo todo! Y pronto el señor Osborne tendrá que revisar algunas cosas… y algunos prejuicios se verán sacudidos a fuerza del mágico conocimiento.

Anne Francis (todavía sin ese lunar en el extremo del labio inferior que hicieran famoso ella y la italiana Virna Lisi), nunca había estado tan bella y tan encantadora como en este modesto filme hecho con gran austeridad de medios, pensando tan solo en mostrar lo poderoso que es el calor de hogar y el gran peso que tiene el carácter y la integridad para poder realizarnos como personas claras y felices.

Recomendable para verla en familia.