arrow

La tierra (1930)

La tierra
75 min.
7,5
1.089
Votar
Plugin no soportado
Añadir a listas
Disponible en:
Compra
Película completa (RUSO con subtítulos en INGLÉS)
Ver 2 más
Sinopsis
Un viejo campesino ucraniano se dispone a morir sobre la tierra en la que ha trabajado toda su vida. Su nieto, Vasil, decide entonces que el consejo de la villa debe comprar un tractor para compartirlo entre los granjeros, que unidos vencerán a las dificultades de la naturaleza y a la opresión de los ricos terratenientes. (FILMAFFINITY)
Género
Drama Cine mudo Propaganda
Dirección
Reparto
Año / País:
/ Unión Soviética (URSS) Unión Soviética (URSS)
Título original:
Zemlya
Duración
75 min.
Guion
Música
Fotografía
Compañías
Links
Premios
1930: National Board of Review (NBR): Top 5 películas extranjeras
9
El Hombre y la Tierra
Soy de los que opinan que el sonoro llegó demasiado pronto, pues a finales de los veinte el cine mudo alcanzó tal grado de excelencia, que es una lástima que no dispusiera de algunos años más para regalarnos nuevas obras maestras. "La tierra" se estreno en 1930, cuando en muchos países ya se iniciaban las producciones parcial o totalmente sonoras, pero llegó a tiempo para ser uno de los grandes testamentos del cine mudo.

Como todo el cine soviético de la época, la película debía en principio responder a algún punto programático del gobierno, en este caso —y al igual que "Lo viejo y lo nuevo" de Eisenstein—, las políticas de colectivización agraria mediante las cooperativas y el avance tecnológico, simbolizado por la llegada de un tractor. Es interesante observar como el discurso ideológico del film no equipara mecanización con deshumanización (como sucederá, por ejemplo, en "Tiempos modernos") ya que aquí el tractor es temido por los caciques y ansiado por los campesinos, que se revelan como los que auténticamente aman y sienten la tierra.

Pero Dovzhenko —y aquí reside la grandeza del film— convirtió todo esto en puro "McGuffin", y lo que nos legó en realidad fue un sublime poema cinematográfico sobre el ser humano y la naturaleza, como entidades indisolublemente unidas: el ciclo humano y eternamente renovado del nacimiento y la muerte, en armonía con el de la siembra, desde la semilla hasta el fruto; todo ello, a través de unas preciosas e imborrables imágenes. La poesía, claro está, no era el objetivo de las autoridades, y el director recibió severas críticas por no haberse limitado a la propaganda.

El clímax emocional del relato lo proporciona una procesión fúnebre, explícitamente laica (los personajes reniegan de la jerarquía eclesiástica e incluso niegan a Dios); y, sin embargo, la película es profundamente espiritual, casi mística, en su concepción panteísta y cíclica de la existencia. En este sentido, se hermana claramente con la posterior "El río", de Renoir.

Dado que a los cinéfilos nos encanta hacer listas, a cuál más extraña, propongo la escena que he comentado como uno de los cinco mejores cortejos fúnebres del cine, al lado de los de "El tesoro de Arne", "Sierra de Teruel", "El sol siempre brilla en Kentucky" y "El camino a casa". Elijo todos ellos por su plasticidad formal y la emoción que me provocan como acto comunal de solidaridad.

Finalmente, como curiosidad podemos constatar la aparición de un desnudo femenino, tres años antes que Hedy Lamarr se quitase la ropa en "Extasis" —película que siempre se ha vendido, publicitariamente, como la que contiene el primer desnudo de una actriz en el cine comercial—. Todo en esta vida tiene antecedentes, y ahora podemos recordar, por poner otro ejemplo, que ya en 1926, en "El hombre con la cámara", Vertov nos muestra —lógicamente, sin intencionalidad erótica— un plano frontal del sexo femenino justo después de dar a luz.
[Leer más +]
53 de 57 usuarios han encontrado esta crítica útil
9
Un nuevo renacer
Con un sencillo argumento como transfondo Alexander Dovzhenko siembra una maravillosa película y el tiempo, testigo omnipresente, la hace madurar ofreciéndonos un fruto extraordinario para los sentidos. Tierra (Zemlya) estrenada en 1930 no solo destaca por su mensaje propagandístico, el avance tecnológico por la llegada del tractor, sino también por su profundo lirismo y es un poderoso testamento del cine mudo cuando en muchos paises ya se iniciaban las producciones sonoras.

A mi modo de ver la grandeza de Zemlya radica en el prodigioso uso de la planificación y el montaje para ofrecernos un colosal poema panteísta. Pocas veces he visto en el cine un nexo entre el hombre y la tierra tan espetacular capaz incluso de transmitir al espectador, a través del arte, la sensación de que estás oliendo aquello que ves: la Tierra.

En pleno siglo XXI, cuando la tecnología nos absorve sin compasión y por medio de lo artificioso podemos oler, tocar e incluso degustar realidades virtuales más alla de lo concebible Tierra se presenta como un paradigma natural del poder del arte y su grandeza y por ende del poder del hombre, la naturaleza y el universo.

Como olvidar esas manzanas mojadas por la lluvia nacida de abrumadoras tormentas, como olvidar las flores acariciando al cadáver en la escena del cortejo fúnebre, como olvidar los campos mecidos por la ventisca de esa Ucrania natal de Dovzhenko, como olvidar esta preciosa película sembrada de imágenes imborrables, naturales, apasionadas.

Hay que ver Zemlya, hoy más que nunca y creer en la utopía de un nuevo renacer.
[Leer más +]
29 de 30 usuarios han encontrado esta crítica útil
Más información sobre La tierra
Fichas más visitadas