Los vampiros (1915)

He decidido realizar la reseña de esta obra ya que hay un gran desconocimiento de la misma (es una película difícil de ver hoy día). Para empezar no es una película al uso sino un serial en diez episodios, algunos están inconexos entre si. Contra la creencia popular, no trata de vampiros, va de una banda de ladrones y terroristas que se hacen llamar así.

Su director Louis Feuillade es por derecho propio el precursor de los seriales (dirigió además de este "Fantomas" en 1914 y "Judex" en 1917), tuvo muchos problemas con las autoridades de su tiempo ya que la obra glorificaba la vida criminal y hacia quedar a las fuerzas del orden público como unos incompetentes. También tuvo infinitos problemas de producción dado que algunos de los actores fueron llamados a filas durante el rodaje (se rodó en plena 1ª Guerra Mundial) y debía cambiar el guión continuamente para adaptarse a la situación.

También cabe decir que incluye un personaje, el de Irma Vep, interpretado por Musidora (cuyo nombre es anagrama de Vampire, el nombre de la banda) que es el de una mujer sexualmente liberada y fatal (el antecedente de la clásica Vamp), algo nada habitual en la sociedad de la época.
En fin, una obra muy recomendable tanto por sus argumentos (llenos de acción y entretenimiento), como por su gran fotografía y calidad artística.

169/28(27/04/09 Resulta imprescindible su visión para los amantes del séptimo arte, pues la cinta es pionera en el género del thriller y posee escenas que por su ingenuidad son adorables. El argumento gira en torno a una banda de malhechores que actúan en París, se llaman “Los Vampiros”, entre los que destaca Irma Vep, la primera femme fatale del cine, es sin duda la estrella del serial, tiene un papel que es una delicia, para sus fechorías utilizan disfraces de todo tipo, para acabar con ellos está el periodista Philip Guerande acompañado por el gracioso Manzamette. La cinta está estructurada en diez episodios gozando de secuencias de acción que son todo un adelanto a su tiempo, dando lugar a un derroche imaginativo difícil de pensar para su tiempo, persecuciones en autos, persecuciones por los techos de París, pasadizos secretos, cañones que salen de una chimenea, drogas paralizantes, huidas haciendo rapel por edificios, carreras por lo alto de trenes en marcha, etcétera. El film hay que verlo desde la perspectiva de un estudio antropológico sobre los comienzos del cine y por tanto perdonar su candidez que produce la inocencia de muchas de las situaciones que ocurren. Recomendable a los que gusten de ver el amanecer del cine. Fuerza y honor!!!