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¿Quién mató a la llamita blanca? (2006)

¿Quién mató a la llamita blanca?
112 min.
6,1
132
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Sinopsis
Jacinto y Domitila, los "Tortolitos" son los más famosos criminales de Bolivia. Cuando son contratados para llevar 50 kg de cocaína a la frontera de Brasil, emprenden un viaje que los llevará a través de la selva, la sierra, las montañas y en el que se cuestionarán su futuro como criminales. El hombre detrás de esta operación criminal, conocido como "El Negro", es en realidad un americano rubio y de ojos azules que tiene un secreto muy bien guardado. Detrás de los "Tortolitos" anda una pareja de oficiales anti-narcóticos: el corrupto teniente y su racista subalterno. Lo que podría haber sido un simple arresto, se convierte en un cómico juego del gato y el ratón, burlando los criminales a sus perseguidores a cada paso, con la ayuda de curiosos personajes bolivianos y Guery Sandoval como narrador que expone toda la ironía y la corrupción de la vida en Bolivia. (FILMAFFINITY)
Género
Comedia
Dirección
Reparto
Año / País:
/ Bolivia Bolivia
Título original:
¿Quién mató a la llamita blanca?
Duración
112 min.
Guion
Música
Fotografía
Compañías
2
¿Quién es el peor director de cine boliviano?
Estridente y desordenada comedia de Rodrigo Bellott, es la segunda película suya que veo y espero que sea la última.

Comienza de un modo ágil hasta que se desreglamenta hasta casi el ridículo. Guery Sandoval “el narrador” es el único que deja su sello en el film, el resto de las actuaciones se hunde en un mundillo ensordecedor con un lenguaje escatológico. El griterío es tal que siendo boliviano la tuve que entender gracias al subtitulado en inglés.

El guión es precario y se basa en el racismo, la política y la idiosincrasia boliviana, presenta personajes bolivianos reales como el Mr.Bolivia y alusiones directas como el personaje Cuca Rivero que a todas luces hace referencia a Gloria Limpias, una peluquera boliviana de poca monta que utiliza como fachada los certámenes de belleza del país para desarrollar su verdadera profesión: el proxenetismo.
La historia está llena de altibajos que imploran el uso de tijeras por parte del director, tal vez una duración máxima de hora y veinte minutos la habrían ayudado algo.

Lastimosamente Bellott dirige como un aficionado, con tomas propias de un estudiante de cine de primer mes, (ni siquiera de primer año) que trata de usar todos los recursos de su filmadora nueva, además remata esta inmundicia con un cameo ridículo e inoportuno presentando la peor actuación del film: la suya.
El título de la película es un sinsentido total, imagino que dentro de un cerebro limitado, tratar de buscar un título para una película debe ser complicado, pero llegar al extremo de inventar la muerte de una cría de llama para obtener un título llamativo llega al colmo de la estupidez, tomando en cuenta que esta muerte no tiene relación alguna con la trama.
El final de este bodrio es totalmente inconexo y absurdo.

No me debería quejar por la “muerte” del animal, sino porque a un animal se le den recursos para hacer una porquería como esta.
Dr.Juventus
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18 de 23 usuarios han encontrado esta crítica útil
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