arrow

La piscina (1969)

La piscina
120 min.
6,5
1.981
Votar
Plugin no soportado
Añadir a listas
Tráiler
Sinopsis
Jean-Paul y Marianne disfrutan de unas tranquilas vacaciones en una villa cercana a St. Tropez. Todo marcha a la perfección hasta que Marianne invita a su ex amante Harry y a su hija Penélope, a pasar unos días en la casa. Pronto la tensión empezará a crecer entre los cuatro y, bajo una aparente cordialidad, se creará un clima de celos y sospechas. (FILMAFFINITY)
Género
Intriga Drama Policíaco Celos
Dirección
Reparto
Año / País:
/ Francia Francia
Título original:
La piscine
Duración
120 min.
Guion
Música
Fotografía
Compañías
Coproducción Francia-Italia;
Links
8
En el azul de las aguas
Delon conoció a Schneider cuando andaba por los veintitrés, y ella por los veinte. Ahí comenzó un amor apasionado e imposible. Alain dio fin al romance con un ramo de rosas y unas palabras escritas en un papel. Apostaría que fue el acto del que más tuvo que arrepentirse. Todavía hoy, cuando el viejo actor rememora a la mujer de su vida, la mirada se le empaña sin disimulo aunque esté ante una cámara de televisión. Debió de quererla una barbaridad. Pero la dejó en la plenitud. La excusa que se puso a sí mismo fue que el intenso amor que se profesaban era incompatible con sus carreras en auge.
Imagino cómo lo lamentaría después, cuando ya era tarde. Cuando cada uno siguió derroteros diferentes y él recibió el golpe de la pronta muerte de ella.
En “La piscina”, su ruptura quedaba ya lejana. Él se había casado, tenía un hijo y se hallaba más o menos en el trámite del divorcio. Ella también estaba casada y era madre.
Parece como si los años de separación se hubieran esfumado como por encanto. La pareja destila tanta química que se tiene el pálpito de que seguían igual de enamorados. Como si el tiempo, el desengaño y todo lo que no fuera ellos dos se pudieran borrar. Volvieron a liberar su pasión siquiera en la ficción, aunque yo estoy convencida de que los besos, los abrazos y las sensuales caricias dictados por el guión se los prodigaron de verdad, con la tapadera de su profesionalidad, pero quizás fue una de las últimas ocasiones en que aprovecharon para tocarse, mirarse con fuego y amarse.
Los dos lucen pletóricos. En una treintena gloriosa, bronceados, con sus cuerpos esculpidos con un cincel muy cercano a la mayor armonía anatómica, sus iris claros destellando al azul de las aguas y bajo el dorado de los rayos del sol. Pura imagen del sensual hedonismo la que marca los compases de un drama cargado de electricidad.
La lentitud que se le achaca puede ser defecto para unos y virtud para otros. Yo me decanto por lo segundo, porque me permite recrearme en la placentera complicidad de la pareja, en el erotismo desbordado, en la pereza de un verano que promete un paraíso de ocio, en el juego de las miradas incendiadas, recelosas y finalmente lastradas. El relax del principio va dando paso a una tensión gradualmente cortante, desde que hace su aparición el otro par, la piedra que cae en la charca provocando olas en expansión.
Celos, morbo, despecho, deseos prohibidos y rencor que estallan en plena canícula, en la piscina, escenario de juegos, diversión y mucho más.
Agua de vida y agua de muerte. Tan invitadora, tan necesaria, tan peligrosa siempre.
Alain y Romy para el recuerdo.
[Leer más +]
72 de 77 usuarios han encontrado esta crítica útil
7
Las vacaciones
Primero de los films realizados por Jacques Deray (1929-2003) en colaboración con el actor Alain Delon. El guión de Jean-Emmanuel Conil cuenta con diálogos de Jean-Claude Carrière y Jacques Deray. Se rueda en escenarios reales de la Casta Azul (Francia) y La Riviera (Italia). Producido por René Pignères y Gérard Beytout para Nouvelle Cinematographique (París) y Tritone (Roma), se estrena el 21-I-1969 (Francia).

La acción dramática tiene lugar en una mansión de lujo con jardín y piscina, situada cerca de Saint Tropez, a comienzos de las vacaciones de verano de 1969. Unos amigos de Marianne (Schneider), que se han ido de viaje a la India, le han dejado las llaves de la casa, donde se ha instalado para pasar unas tranquilas vacaciones con su pareja del momento, Jean-Paul (Delon). Pocos días después invita a pasar unos días con ellos a Harry (Ronet), un antiguo amigo, que se presenta acompañado de su hija adolescente, Penélope (Birkin). Marianne, periodista de éxito, de unos 29 años, es atractiva, sensual y practica el amor libre. Jean-Paul, de unos 33 años, trabaja en una empresa de publicidad. Harry, de algo más de 40 años, es alto ejecutivo de una sociedad discográfica. Los tres viven en París.

El film suma drama, crimen, thriller y policiaco. La casa que ocupan, pese a ser amplia y luminosa, constituye un espacio acotado y limitado en el que la convivencia de cuatro personas ociosas, da lugar a roces, fricciones, desavenencias, sospechas, celos y reacciones despechadas. Por lo demás, la vida focalizada en torno a la piscina, la relajación del baño en ella, los baños de sol, una comida rica en condimentos y otros factores, aportan el marco en el que se da en los personajes una fuerte pulsión del deseo. A la par, en unos casos emergen sentimientos ocultos de frustración y de insatisfacción; en otros afloran sentimientos no declarados de inseguridad y frustración; en determinadas circunstancias hacen su aparición en escena comportamientos violentos y agresivos; y a veces los sentimientos de soledad y fracaso o el simple aburrimiento se quieren aliviar mediante el consumo abusivo de alcohol. Las frustraciones e inseguridades de algunos se ven subrayadas y agravadas por las situaciones de éxito profesional, económico y sentimental de otros, con las que contrastan y con las que entran en conflictos de envidia, celos, resentimiento, etc.

Los protagonistas sobrellevan bajo apariencias educadas y exquisitas sus diferencias, sus sentimientos encontrados y sus conflictos. Esto no impide que anide en sus ánimos, en medida desigual y de forma diferente, un mundo tumultuoso de bajas pasiones (odios, afanes de venganza, egoísmos, intolerancias, violencia), que se ve fomentado por el sosiego del lugar y la serenidad de unos días de sol franco y cielos “que parecen blancos de tan azules que son”.
[Leer más +]
28 de 31 usuarios han encontrado esta crítica útil
Relaciones 1
Más información sobre La piscina
Fichas más visitadas