Islas Marías (1951)

Otra película de Fernandez que no se parece en nada a sus melodramas campestres, tampoco es una película de cabarés ni de rumberas. Digamos que entra dentro del subgénero Pedro Infante que eran melodramas hechos para su lucimiento aunque acá si bien es el protagonista obviamente, no es el personaje que más le interesa al director, que incluso solo lo deja cantar un tema cuando generalmente por lo menos en la última parte de su carrera cantaba tres. Quien le interesa al director es la madre, que si bien una señora muy buena, por su candidez y falta de rigor provoca involuntariamente que dos de sus hijos se entreguen a la mala vida, el mayor abandona su carrera y todas las noches anda en una fiesta distinta emborrachándose, mientras que la hija tiene "relaciones sexuales sin estar casada", obvio esa mujer a pesar de ser una santa por no tener firmase y carácter sufrirá una tragedia tras otra.
La película tiene muy bue ritmo, quizás la más ágil que he visto hasta ahora de Fernández, se resiente un poco que al principio a modo de preámbulo le dan mucha importancia a personajes que después de que aparece Infante se olvida casi que por completo, cuando sus subtramas eran muy interesantes.
Todo el tema del honor, la moral, la honradez, el buen ser que recalcan tanto en la primera parte hoy causa risa tanto por su conservadurismo recalcitrante como por las forma tan estúpida en que lo hacen.