arrow

La gran noticia (2013)

La gran noticia
85 min.
5,8
82
Votar
Plugin no soportado
Añadir a listas
Trailer (FRANCÉS)
Sinopsis
Dos periodistas radiales con miradas opuestas viajan a Portugal en 1974 para registrar la ayuda suiza a naciones con problemas, y se encuentran con la Revolución de los Claveles en esta comedia dramática. (FILMAFFINITY)
Género
Comedia Periodismo Años 70 Comedia dramática
Dirección
Reparto
Año / País:
/ Suiza Suiza
Título original:
Les grandes ondes (À l'ouest)
Duración
85 min.
Guion
Fotografía
Compañías
Coproducción Suiza-Portugal-Francia;
Premios
2014: Premios del Cine Suizo: 3 nominaciones, incluyendo mejor película
2013: Premios del Cine Suizo: 3 nominaciones
5
Cuarteto carismático… y revolucionario
La última propuesta del director Lionel Baier tiene sus instantes de gracia y de picardía. También pierde el hilo, en breves pasajes, y apuesta, en alguna que otra secuencia, al cambio de tono para no estancarse en un solo tipo de matiz. El sarcasmo está a la orden del día y los intérpretes colaboran mucho y positivamente en este aspecto. Todo se desarrolla durante 85 minutos.
De impecable ambientación y situada en 1974, La gran noticia no es una comedia de carcajadas, sino de momentos de chispa. Pinceladas y acertados bocadillos que no se extienden más de lo necesario en la premisa buscada. Un estilo de humor particular, sazonado con el siempre gustoso recurso a la sátira. El cuarteto principal congenia gracias a la buena química y al carisma de cada uno de los personajes. Valérie Donzelli, llamativa, le aporta el toque sensual, provocador y desafiante al grupo. Y por eso se destaca. Aquí encarna a una periodista obsesiva con conseguir su propio programa, que es enviada a Portugal para compartir la cobertura radial con un reconocido en la profesión (Michel Vuillermoz), un hombre con crecientes problemas en su memoria. Al equipo se suma un técnico (Patrick Lapp) y más adelante un joven portugués que maneja el idioma francés (Francisco Belard).
La bajada de línea que le realizan a quien comanda la emisora se justifica en el hecho de enseñarle a la gente el flanco positivo de lo que acontece en el mundo. Las personas no tienen ganas de levantarse de su cama con noticias que hablen de guerras y conflictos, parecen inculcarle a quien lidera la encomienda de radiodifusión. Entonces les solicita a sus enviados que se encarguen de divulgar la ayuda suiza a países con dificultades. En el viaje, y de trasfondo, estalla la Revolución de los Claveles.
La película gana puntos cuando apela a la ironía, componente que se hace presente desde la primera secuencia de la narración, hasta en los diálogos de quienes interactúan y en diversas situaciones que ocupan lugar a lo largo de la proyección. Los cuelgues e inconvenientes a la hora de rememorar eventos por parte de Michel Vuillermoz, así como también su deficiente portugués, son factores que juegan una agradable pasada para el espectador.
Incluso siendo poseedora de un metraje escaso, La gran noticia no acarrea un nivel de enlace parejo y quizás ese sea uno de sus déficits más importantes. Algunos cambios bruscos (pocos, por cierto) en cuanto al tinte que parecía primar en el relato tampoco acaban resultando de los más atinados.
En líneas generales, Les grandes ondes es un film de pasillos amenos, de ritmo agradable pero que no aporta nada sobresaliente dentro del género.

LO MEJOR: las actuaciones. El recurso a la sátira como modo de humorada.
LO PEOR: pierde el fuelle en algunos momentos. No genera entusiasmo para volverla a ver.
PUNTAJE: 5

http://cinefiloclub.blogspot.com.ar/2014/04/la-gran-noticia-les-grandes-ondes.html
[Leer más +]
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
6
La gran noticia
"¿Suiza donó sólamente un reloj? ¡Nooo!..., ¡también financiamos agua tibia!
Una misión: elaborar un informe sobre la influencia de suiza en tierra portuguesa con un periodista radiofónico que tiene lapsus de memoria, una compañera de profesión feminista con aires de ambición para ascender en su carrera, un veterano técnico muy curtido y un joven traductor que nunca ha salido de las faldas de su mamá, una furgoneta exhibida actualmente como memoria grata de dicha aventura y kilómetros por delante para descubrir la excursión atolondrada que vivieron dichos protagonistas en 1974 al encontrarse en medio, por casualidad, de la revolución de los claveles.
Historia narrada con música jocosa, ambiente risueño y ligero toque de comicidad, ocurrencia e ironía, una tibieza graciosa, chistosa y aguda que se percibe con gran profundidad y funciona en ocasiones pero, que en otras, se pierde a pesar de su buena voluntad y disposición de agrado, personajes muy bien avenidos, que se hacen querer con facilidad y a los que resulta ameno, placentero y cordial seguir en su loca e imprevista desventura, ya hecho anecdótico a recordar con añoranza, más una fotografía cálida y añeja de un recordado tiempo pasado matizada por una puesta en escena sencilla pero absorbente, con diálogo frenético sin tiempo ni pausa para su digerido bienestar holgado que dispone el clima adecuado para viajar y transportarse a dicho glorioso periodo.
Un retrato bien logrado del libro de la selva caótico en que se convirtió dicha experiencia, un trabajo encomendado a piedra-papel-tijera en su inicio para distraer al personal no dispuesto a pensar demasiado, que se convierte en suceso curioso a recordar en el tiempo pues "la memoria, camarada, es como el cielo en una noche de verano, las miles de estrellas son como recuerdos que iluminan la noche que tenemos por delante, cada una de ellas cuenta una historia así como cada fotografía esconde una leyenda".
Conocer sus historias, como devinieron, como se tropezaron y fundieron, desmenuzar esa fotografía perenne que esconde una suculenta vivencia y provoca una sonrisa tenue de efecto moderado, intercalada risa breve de sabor apetecible en un conjunto de antaño aire gustoso que se recibe con benevolencia en una línea que transcurre desde la banalidad accidental de intensidad leve que busca entretenimiento superfluo hasta la narración de hechos importantes que marcaron el destino de Portugal y adyacentes con el indiscutible lema "¡el pueblo unido jamás será vencido!"
Buena sintonía y una destilada sociabilidad interpretativa entre los protagonistas para un elenco que distrae suavemente, al que no se le pide mucho más que escenas bonitas de encuentros simpáticos y alegres y una afectuosidad perceptiva con buen rollo de plantel precipitado, movimientos alocados y diversión neutra.
La gran noticia no urge tanta atención ni importancia, se conforma con misiva leve de agradable recorrido que sin mucho esfuerzo crea un climax apatecible de recuerdo perecedero válido para alegrar el momento y sintonizar con astucia y habilidad con lo narrado y, ¡a otra cosa que vamos con prisa y el tiempo es oro!
Gusta con levedad, se consume con ligereza, de ingravidez sugerente, espíritu moderado y razón breve, sin mayores contratiempos que felicidad condensada de escaso sacrificio y fértil beneficio..., ¡que hubieran bordado nuestra Concha Velasco, Jose Luis López Vázquez, Alfredo Landa y Tony Leblanc o bien Antonio Ozores, Andrés Pájares, Fernando Esteso etc. etc. etc., más nuestra gracia española!, ¿te imaginas!

http://lulupalomitasrojas.blogspot.com.es/
[Leer más +]
Sé el primero en valorar esta crítica
Más información sobre La gran noticia
Fichas más visitadas