Danny Glover protagoniza esta emocionante secuela como un teniente de policía cuyos agentes encuentran una pila de cadáveres mutilados. En vez de ser obra de bandas rivales, como creía al principio, los violentos asesinatos son obra de una criatura extraterrestre invisible y letal. El alienígena está en la jungla urbana de Los Ángeles, y ¡además el teniente es su próximo objetivo!