La primera vez que la vi, me pareció una simple pelicula del montón. Tuve que volverla a ver para darme cuenta de que estaba ante una verdadera obra de arte.
Ridley Scott vuelve a sorprendernos con un notable trabajo con "El Gladiador", que cuenta con una interpretación decente ( mas, no merecedora del Oscar ) de Russell Crowe y un trabajo sorprendente de, en aquel entonces, un no muy rankeado Joaquin Phoenix como el villano del film.
Para verla una y otra vez y dar cuenta de toda la gama de perfecciones que esta maravillosa cinta guarda, quizá, muy celosamente.