Basado libremente en la leyendas chinas de Huli Jing este episodio logra mezclar hábilmente la magia con el mundo de los autómatas en una animación que hace referencia a los acabados del ánime, bella música, buenos personajes centrales y una linea argumental simple pero disfrutable terminan un corto que hipnotiza por momentos pero que parece muy explotable para un formato de largometraje donde se permita desarrollar más sus elementos.