Es mala. Dicen por ahí que ni siquiera el señor Freeman salva la película, yo diría: ¿Cuándo ha salvado el señor Freeman una película? Este enchufado de los estudios de cine que aparece hasta en la sopa, que no viene ni el Tato pero él sí, que un día te le vas a encontrar en tu cuarto cuando te vayas a acostar, que no tiene más que un registro pero muchas pecas en la cara, esa cara que no cambia la sonrisita ni siendo Dios ni siendo el presidente USA (igual es que son la misma persona), que sonríe de la misma manera a tu tía la del pueblo que a Perico de los palotes, que le da lo mismo ser el colega de Robín de los bosques que abogado con un perro de socio, todo lo interpreta igual, con la misma parsimonia de hombre feliz, con el karma en punto muerto, en éxtasis... Pues lo que hay que decir es que la película no la salva ni Ashley por más empeño que ponga la pobre. Dice otro que el guion tiene un giro muy bueno, jajaja, no hay más giro bueno que el que se da la gorda en la cama, lo demás ya lo digo, inconsistente, un guion inconsistente para tragártelo sin más, y además, una película protagonizada por Jim Caviezel lo dice todo: Mala. No obstante me disculpo, no me gusta Freeman ni Caviezel, ¿por qué? No lo sé. Tal vez sea un delito de odio, pero no me gustan, y juntos pues ya ves, menos, pero no es odio porque la pongo un 3. Y si no, que me juzguen los tribunales de los marines.

Porque es de militares americanos, que no bélica, y es de juicios, que no juiciosa, y las películas americanas de juicios militares americanos están todas tratadas por el mismo patrón, repito, son inconsistentes, sin una realidad jurídica, sin pruebas fehacientes, que quieren enviar al cadalso a uno de los suyos sin pruebas, tan solos con acusaciones de descerebrados marines, y encima los productores se la creen, está tomada muy en serio, tan en serio que muy pronto pasa a ser de lo más aburrida que hay, y lo digo porque los únicos militares americanos a los que se les puede aguantar son los de las cabras, los que miraban fijamente a las cabras, película, por cierto, basada en la estrategia de los legionarios españoles, pero ésta de militares americanos en juicios militares con pinta de prepotentes, estúpidos y ególatras no tienen cabras... pero sí cabrones. Se necesita mucho aguante para esta tontería, que la pongo un 3 por Ashley y sobre todo por Amanda Peet, que igual es tonta del culo en la vida real, como la otra, pero me gusta y ni sé porqué, bueno por eso la pongo un 3 y también porque quiero subir un poco mi nota media; como se ve, soy un romántico, pero no saldría de copas ni con Ashley ni con Amanda. Y ahora, como dice Cripta: ¡Pulgar abajo! Digooooo ¡Arriba!