El sendero de la anaconda (2019)

Dos grandes hombres de ciencia, residenciados en Colombia: Wade Davis (Vancouver, Canadá, 1953), antropólogo, etnobotánico, fotógrafo y escritor (“La Serpiente y el Arco Iris”, “El Río”…) y Martin von Hildebrand (New York, EE.UU. de Norteamérica, 1943), etnólogo, sociólogo, antropólogo y también escritor, miembro de la Fundación GAIA Amazonas y del programa COAMA, han liderado constantes esfuerzos para asegurar la permanencia y los derechos territoriales de las etnias indígenas, con el ánimo de proseguir, con ellos, la indispensable protección de la selva tropical amazónica colombiana.

¿Por qué es tan importante esta labor? ¿Cuál es el papel real que juegan los indígenas? ¿Qué importancia tiene la Amazonía para Colombia y para el mundo? ¿Es necesario que vivan esas comunidades en tan extensos territorios?... Estas, y muchas otras preguntas, van a tener unas científicas respuestas que darán cuenta de cosas trascendentales que, por ignorarlas, por la ceguera cultural y la ambición desmesurada, han llevado a que los detentores del “poder”, maltraten, aniquilen o mantengan en el olvido a unas culturas ante las que, quizás, deberíamos inclinarnos.

<<EL SENDERO DE LA ANACONDA>>, es un documental que debería ser visto en todas las escuelas del mundo donde se aspire a comprender el mundo que nos rodea, y por supuesto, más que nadie deberían verlo aquellos gobernantes que entiendan que, hay que empaparse de realidad para poder gobernar con criterios de justicia. Estamos ante un material hecho para traer luz a una humanidad con fuerte resistencia a avanzar, pues, aún subsisten sectores de la política y de la sociedad que siguen poniendo diques al río de la cultura.

El director, Alessandro Angulo, nos reconforta con magníficos paisajes naturales; nos permite conocer algunos rituales de valiosos significados… y nos pone en contacto con los científicos mencionados y con algunos representantes de la comunidad Macuna (en Vaupés), cuyos diálogos valdría la pena escuchar, una y otra vez, hasta conseguir introyectarlos.

Algunas frases para recordar:
“El hombre de ciudad piensa que una montaña es una roca y por eso la destruye. El indígena está convencido de que es un lugar sagrado y entonces la venera”.
“El conocimiento de los indígenas es fundamental para el cuidado del planeta”.

¿Y quienes, más que los indígenas -pregunto ahora-, son los que, a todo riesgo, nos han ayudado a descubrir las plantas medicinales?

Los pueblos indígenas amazónicos tienen una voz que merece ser escuchada. Así que aquí hay dos tipos blancos que te cuentan su historia.

Le hablan a la cámara y te narran las virtudes y la fragilidad de culturas que están por desaparecer, y de lo mucho que a ellos les preocupa. Lo narran sin algún orden en particular, como divagando un poco, pero para que no te aburras entremedio te ponen largos minutos de tomas aéreas del amazonas y de los tipos navegando ríos y recorriendo selvas. Largos minutos. Para qué perder el material, si ya lo grabamos.

Y también está la historia del mentor del antropólogo que protagoniza el relato, un tipo brillante según te cuenta, un gran tipo al parecer, otro extranjero que hizo mucho por el amazonas y por esta gente que sufre tanto. Da la impresión en un comienzo que este será un eje conductor del relato, pero luego parece que se les olvida.

Y así lo que daba para un lindo video de quince minutos sobre una estimable iniciativa de conservación, se alarga hasta pasada la hora, lleno de comentarios redundantes e inconexos, dejando una sensación de confusión y finalmente de vacío.