Mr. Right (2009)

Me gustan las manifestaciones innovadoras en cualquier campo del arte, como me gusta el arte clásico, pero así como en este último ha habido algo que le ha hecho permanecer hasta nuestros días, en las nuevas manifestaciones tendrá que haber algo que le haga perdurar. Esta película juega con la planificación para tratar un tema manido, las relaciones entre homosexuales, y poder conseguir una película moderna, pero me temo que solo va a ser moderna en los pocos años que pasen antes de que la gente se olvide de haberla visto. Para mí, experimentar con el lenguaje cinematográfico es modificarlo para llegar al espectador de otra manera, pero si no se transmite nada al espectador, solo planos y colorido, no hay ningún logro en la experimentación. En la primera tercera parte de la película los nombres y las relaciones entre los personajes se producen a tal velocidad y de forma tan caótica que me he sentido algo perdido, y aunque después he cogido el hilo, ya considero que he perdido una buena parte de mi tiempo para nada. En la segunda parte se produce el nudo donde se relacionan todas las actitudes que antes hemos visto y esta parte es mucho más tranquila, lo que te permite pensar y relacionar todo lo ocurrido. Ahora toma sentido lo que hemos estado viendo hasta aquí y ya hay una cierta tranquilidad para fijarte en otros aspectos de una película, como es la interpretación, nada desdeñable. Pero llega la tercera parte, el desenlace y todo se hace convencional, pero hasta un extremo que resulta pueril. Cuatro planos al final parecen intentar esa nueva expresión con la que había empezado, pero ya es tarde. La música es para salir corriendo, pero cuidado, porque lo que se pretende es que salga corriendo a la tienda a comprar el CD.