arrow

Los tomates asesinos atacan de nuevo (1991)

Los tomates asesinos atacan de nuevo
87 min.
3,4
291
Votar
Plugin no soportado
Añadir a listas
Sinopsis
El ayudante de policía Lance Goyle tiene que investigar los misteriosos ataques de unos tomates asesinos para lo que cuenta con una experta en tomates, El creador de los tomates, Mortimer Gangrena, quiere matar a la tomatóloga porque se interpone en sus planes de conquistar el mundo. (FILMAFFINITY)
Género
Terror Ciencia ficción Acción Serie B Monstruos Secuela Comedia de terror Parodia
Dirección
Reparto
Año / País:
/ Estados Unidos Estados Unidos
Título original:
Killer Tomatoes Strike Back! (Killer Tomatoes 3)
Duración
87 min.
Guion
Música
Fotografía
Compañías
Grupos
El ataque de los tomates asesinos
Links
6
Te ríes y de verdad.
Hasta ayer no tenía ni idea de la existencia de esta película que es claramente de serie B, pero magnífica para echarte unas risas si te la tomas como te la tienes que tomar. Ayer creía que sólo existía una película relacionada con los tomates asesinos y que era donde debutó como actor George Clooney, pero nada de eso. Debutó en la segunda parte y existen tres secuelas de la primera. Y aquí, en la tercera película, se lía la traca de verdad. Su humor es bueno e ingenioso donde se mezcla a un policía que parece sacado de la película "Big" (1988), con Tom Hanks, (por su personalidad infantil) y una científica buenorra especializada en estudiar tomates que si la miras bien tiene una de las caras más extrañas que se puede ver por TV, sin dejar de estar bien buena. La historia es un despropósito absurdo (como supongo serán las cuatro películas), donde se mezcla (sí, el sustantivo me va mucho, XD), el plan de dominar el mundo por parte del malo de turno vestido de una especie de súper comunicador televisivo, con el magnífico "feeling" entre Rick Rockwell y Crystal Carson en todas las escenas. Los tomates tienen ojos, boca y hasta fuman puros habanos y distan mucho de los del film del 78. El guión tiene dinamismo y su final, aunque algo aburrido, sorprende con esa finalización al más puro estilo partido de basket americano.

No se dejan de hacer chistes ni un sólo momento. Se ríen del hockey sobre hielo, de la tensión sexual entre el prota y su "parteneire" femenina. Así como se hacen homenajes cómicos a películas como "Viernes 13" (1980) "Psicosis" (1960) y "Tiburón" (1975). Algunos secundarios como el tipo de cuello lápiz del banco son para partirse la caja nada más salen: "¿¡Me está llamando cabeza diminuta!?" "¿¡Me está llamando señor patata!?". El prota tiene los santos cojones de pedir un Bloody Mary en un bar lleno de tomates, se meten tomates asesinos en una pecera llena de agua negra alegando que es agua del Mar Negro... Tiene "gags" estupendos y te dejan con ganas de más. Aunque es verdad que con el trascurso del metraje van cansando. De todos modos, te la recomiendo si quieres reírte. Es un paseo por la década de los 90 que repetiré de vez en cuando y que no te puedes perder.
[Leer más +]
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
6
ESTO NO ES SANGRE, DETECTIVE... ¡ES ZUMO DE TOMATE!
Lo bueno de las tomatinas es que siempre vuelven (y no lo digo por las de Buñol), con razón de más si tienen a un John Astin que desde el principio tomó conciencia de cuál es su rol: Mortimer Gangrena es un villano de cartoon como El Coyote, Elmer Gruñón o Sam Bigotes.
Y puesto que empiezo mencionándolo a él, no hay mejor forma de ilustrar la asignatura pendiente a la que se enfrenta John De Bello en la tercera entrega que recordando el gag con Morty reprochándose a sí mismo por no poder darle una expresión de fiereza a su criatura hasta que la dotase de ojos con... ¡¡un muñeco de Mister Potato!! en el capítulo anterior.
Y solventado dicho escollo, ¿qué nos queda, pues? Una nueva invasión roja más tocada que nunca -colmillos y ojos mediante- por la varita del por entonces desinflado boom de la comedia "de terror" con monstruos diminutos: Gremlins, Critters, Ghoulies... etc con diferentes personalidades y pintazas.
Esta vez ni el bueno de Jason Vorhees será capaz de rivalizar con su sed de sangre, muertes y destrucción masiva, en la ciudad o en la mismísima Crystal Lake (es decir, dentro de lo que las licencias permiten).
Un oficial de policia (Rick Rockwell) y una experta tomatóloga -como los "ólogos/as" expertos en todo que colaboran en LA SEXTA pero con tomates, vamos- mas Stephen Peace enfundándose (por última ocasión) el uniforme de paracaidista: sí que volvería para colaborar en la escritura de... bueno, eso ya vendrá.
Viendo la naturalidad con la que a Crystal Carson le entran sus ataques de histeria -dentro o fuera de la ducha- no me cuesta imaginarla como la entrenadora de actuación que es desde hace veinte años. No, ahora en serio: se nota que domina a la perfección lo que implica una interpretación en una spoof movie.
Si la primera ponía el acento en la invasión -más o menos, lo que los dólares permitían- y la segunda en las pesquisas del mad doctor, ésta reincide sobre lo segundo y suple las carencias de lo primero en su fundadora con igual humor surrealista y sin medio dedo de frente.
¿Acaso podía ser de otra forma??
Esto no es sangre, detective. Es... ¡¡¡zumo de tomate!!! (un pelín menos ácido)
[Leer más +]
Sé el primero en valorar esta crítica
Más información sobre Los tomates asesinos atacan de nuevo
Fichas más visitadas