Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Estepario:
8
Drama Roman Kogler tiene la oportunidad de ser liberado con antelación de su centro de detención juvenil. Pero todo está en su contra: es poco comunicativo, solitario, sin familia y no parece adecuado para resocializarse. Lo único que le ayuda es su trabajo en una funeraria. (FILMAFFINITY)
10 de enero de 2014
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
En su debut como director Karl Markovics nos regala una obra increíble, una opera prima que a más de uno le hubiera gustado dirigir. En efecto, 'Atmen' (Breathing) despliega un estilo tranquilo, ameno, contemplativo y reflexivo. Se sirve de un ritmo pausado, con un uso de la cámara majestuoso, en el cual Markovics despliega su talento para dotar de personalidad y estilo a la obra.

'Breathing' se centra en un joven de 19 años (Kogler) que reside en una correccional juvenil. Su vida está marcada de desdichas desde su infancia, siendo su personalidad un claro reflejo de esto. Es retraído, frío y distante. Su existencia está prácticamente limitada a mantener un trabajo fijo y ganar el juicio para obtener su libertad. Algo que, para Kogler, no resulta nada fácil. Hasta que, cosa no casual, decide por cuenta propia trabajar en una funeraria.

Markovics se apoya en una soberbia y magistral dirección para crear un atmósfera desoladora, triste y rutinaria de una vida que no parece dar ni recibir mucho de sí. Con diversos planos vemos y vivimos en carne propia la desolación de Kogler, su vacío y su impotencia al no encontrar las herramientas necesarias para salir adelante. Y la cámara, tranquila e imparcial, nos muestra lo realmente duro que puede ser ello. Nos hace ser Kogler: ver lo que él ve, siente, sufre, añora. Nos hace reflexionar sobre la injusticia, el amor, la muerte, la responsabilidad y, quizás sobre todas las cosas, sobre el duro y triste destino que algunas personas sufren.

Desde el punto de vista filosófico, 'Breathing' nos retrata duramente cómo la suerte que nos toca es muchas veces responsable de lo que somos y hacemos con nosotros. No en vano en la película se cita a Sartre: 'El infierno son los otros'. El mismo Sartre que genialmente también dijo que 'Un hombre es lo que hace con lo que hicieron de él'. Ese Kogler que vemos, triste y ermitaño, es ese hombre 'sartreano', desolado, que lucha por darle un molde, un sentido, una forma a esa pobre vida a la cual lo 'arrojaron'.
Estepario
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow