El tema de fondo gira en torno a la construcción de un hotel en una isla griega muy bonita. Los personajes rinden tributo a una mujer que tuvo la ilusión de afincarse allí y montar un hotel que se malogra por razones desconocidas. Se exagera el carácter y la bondad de esta mujer, que en realidad es más una vividora que otra cosa. Pero todo esto en realidad, no es más que una excusa para juntar toda una serie de canciones del grupo ABBA y ponerles una coreografía. Al final, lo que hay que valorar realmente es esto último. Y esto último, queda bastante resultón. Las canciones todos sabemos que son buenas y la coreografía cumple el papel de adornar las canciones. Por cierto, que las voces que las cantan, son más bien regulares. Los bailes no son tampoco nada del otro mundo, pero la coreografía y el entorno, son agradables de ver. El resumen es que cumple el objetivo de pasar un rato agradable, sin más aspiraciones.