No le creí una sola línea a esta película.

No hay química entre la pareja de protagonistas, es absolutamente increíble que una paciente con esquizofrenia tenga un comportamiento normal recién escapada de un psiquiátrico donde debía estar medicada para esta enfermedad, y el síndrome de abstinencia?. Por otro lado los momentos de supuesta locura fueron actuaciones infantiles acercándose por mucho a la ESTUPIDIZACIÓN del personaje y para cerrar con broche de oro, el experimentado psiquiatra jamas se enteró de que la esquizofrenica con alto grado de paranoia y quien ademas escuchaba voces era la mamá de la protagonista, osea cuanto tiempo de terapia perdidos? para que en una conversación en una cafetería el conserje del hospital lograra sacarle la verdad a la protagonista.
Película para borrar de la computadora apenas terminas de verla.