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Voto de Luis Guillermo Cardona:
10
Drama Tras la dolorosa pérdida de su hijo, Edna, una valiente mujer de Texas, decide crear un orfanato para ayudar a los niños más desvalidos y necesitados de ayuda; pero los ciudadanos más conservadores no verán con buenos ojos la creación de una institución de acogida para niños nacidos fuera del matrimonio. Edna luchará incansablemente para conseguir legalizar el orfanato. (FILMAFFINITY)
4 de marzo de 2009
6 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hace ya algunos años, llegó a mi vida un mensaje que sacudió todos mis conceptos. Sentí mucha resistencia para poder aceptarlo, pero, tras releerlo numerosas veces y sopesarlo frente a mis propias experiencias, llegué a la conclusión de que contiene una precisa interpretación de las leyes existenciales. Se me da ahora este instante para que lo comparta contigo:

“Nadie puede sufrir pérdida alguna, a menos que esa haya sido su propia decisión. Nadie sufre dolor, salvo cuando él mismo así lo decide. Nadie puede estar afligido, sentir temor o creer que está enfermo a menos que eso sea lo que desee; y nadie muere sin su propio consentimiento. ¡Jamás ocurre nada que no sea una representación de tus deseos, ni se te niega nada de lo que pides”.

La historia de Edna Gladney, una maravillosa mujer que, hasta su muerte, luchó por los niños desprotegidos de Texas, en los Estados Unidos de Norteamérica, apareció en una historia escrita por, Ralph Wheelwright; fue magníficamente adaptada a guion por, Anita Loos (con la colaboración de Hugo Butler), y brillantemente llevada al cine por el director, Mervyn LeRoy.

El proceso existencial de ésta gran dama, se nos describe con sabia precisión, haciendo de entrada, una clarísima referencia a los sucesos de aparente adversidad que, luego, servirán para que ella pueda determinar su sendero y dar amor a borbotones como era su gran anhelo.

Quien observa los hechos aislados, suele hacer las consabidas preguntas o comentarios cargados de ignorancia y escepticismo: ¡¿Cómo permite, Dios, que le pase algo así a una familia tan digna?! ¡Qué injusticia la de la vida con una pareja tan buena! Y el universo permanece sordo a nuestros exabruptos, porque sabe ¡bien que sabe! que la muerte no existe y que jamás se toma una decisión que sea pensada para nuestro mal.

Casada con, Samuel Gladney, un cajero de banco que supo que ella sería su esposa desde el instante en que la conoció, y quien siempre la animó y apoyó para que abriera su corazón a los desprotegidos, Edna luchó con él a brazo partido, para vencer así las pruebas que han de determinar si de veras se está en el camino escogido. Su casa, primero se convierte en una guardería, y después, terminará fundando una gran institución desde la cual luchará férreamente para cambiar las leyes discriminatorias del país.

La película contiene un emotivo drama que, Greer Garson, sobrelleva con verdadero carisma; un delicioso humor de parte de Felix Bressart, el dedicado pediatra que se mueve como su sombra; y hay también momentos de gran valor anecdótico como el juicio al que se enfrenta, Edna, contra el padre chantajista que quiere ver a su hijo... o la encantadora diligencia del formulario de solicitud de adopción con la singular esposa del miembro de la Cámara.

Con, <<DE CORAZÓN A CORAZÓN>>, estamos ante un filme conmovedor, profundo, ejemplar, y con una visión precisa acerca de los hilos con que evoluciona nuestra existencia.
Luis Guillermo Cardona
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