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España España · Barcelona
Críticas de Townshend
Críticas 3
Críticas ordenadas por utilidad
Cowboy Bebop (Serie de TV)
SerieAnimación
Japón1998
8,0
17.124
Animación
9
3 de marzo de 2010
36 de 38 usuarios han encontrado esta crítica útil
No soy ningún fanático de la ciencia ficción, el Western es el género cinematográfico que menos me gusta y soy bastante escéptico con el anime.
¿Cómo es posible que este Anime Western de ciencia ficción haya podido hacerme sentir tan cerca de la perfección cinematográfica?
La respuesta más abajo. Primero hagamos una pequeña sinopsis…

Año 2071, la raza humana se ha ido expandiendo por todo el sistema solar. La expansión de la raza humana también ha expandido el crimen. Esta expansión del crimen hace que la captura de los criminales sea cada vez más complicada. Solución: Ofrecer recompensas por las capturas de criminales.
La serie se centra en dos cazarrecompensas, Spike y Jet, que a bordo de su nave espacial el “Bebop” recorren el sistema solar a la caza y captura de los criminales más buscados a cambio de las recompensas.

Es una sinopsis muy típica y cargada de tópicos. Pero uno de los grandes fuertes de esta casi-perfecta serie anime de 26 capítulos es que rompe con muchos tópicos.
Lo primero que me gustó de esta serie es que HUMANIZA la ciencia ficción. Uno de los problemas que le veo a la ciencia ficción es que se centra más en los acontecimientos que en los personajes. En Cowboy Bebop son los personajes el eje central de la historia. El universo gira alrededor de los personajes, no son los personajes los que giran alrededor del universo.
Otra cosa interesante es que los personajes tienen un pasado que no les deja evolucionar. No son los típicos personajes tipo LOST que cambian su forma de ser cinco mil veces en un corto período de tiempo. La serie nos muestra como son los personajes y nos va ofreciendo pequeños trozos de sus vidas en forma de flashbacks para que entendamos porque son así. (Pero repito, NO CAMBIAN. Simplemente intentan seguir adelante arrastrando el ancla de su pasado. En ciertos momentos llegan a entenderse a si mismos. Pero entender no significa cambiar. Entender es una forma de evolución estática. Cambiar es una forma de evolución dinámica muy dificil de conseguir y muy fácil de ver en la moda serial actual).
Cada episodio homenajea a alguna película/canción/personaje mítico de la historia. Por ejemplo encontramos homenajes a Kareem Abdul-Jabbar, a Bruce Lee (el arte marcial que usa Spike es Jet Kun Doo, hay un episodio homenaje a ALIEN brutal, un episodio titulado Pierrot le Fou haciendo referencia al personaje/película de Godard, tenemos capítulos con títulos como Bohemian Rhapsody, Honky Tonk Woman, Sympathy for the Devil, Wild Horses, Black Dog Serenade, Toys in the Attic…
Aparte, cada episodio es un homenaje al arte audiovisual del cine. Habla el lenguaje cinematográfico de las grandes obras maestras del cine. Tiene momentos en los que se fusionan guión, personajes, Banda Sonora, diseño y fotografía dando algunos chispazos de perfección que hacen que se humedezcan los ojos. Si, que se humedezcan los ojos. Porque una de las reacciones más sinceras ante la perfección es la secreción lacrimal involuntaria.
Townshend
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9
23 de diciembre de 2009
22 de 23 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tengo debilidad por el cine de AKIRA KUROSAWA. Si, AKIRA KUROSAWA en MAYÚSCULAS (su nombre no se puede escribir de otra manera).
KUROSAWA hace CINE (también en mayúsculas). Sus historias, su forma de contarlas y los actores que utiliza hacen de cada una de sus películas una pequeña obra de arte que te empapa de sentimientos.
Ikiru es una de las mejores películas que he visto en mi vida. Podría escribir muchas páginas sobre ella pero no tengo ni tiempo ni ganas de aburriros con detalles.
Os voy a hacer un resumen sentimental de lo que representa, para mi, la película.

Tengo la creencia personal que cuando nacemos, nacemos con el corazón caliente. Muy caliente. Es esa calentura del corazón la que nos hace sentir las pasiones que sentimos cuando somos más pequeños, odiamos y queremos con mucha fuerza. Pasamos de la tristeza a la felicidad sin reflexionar. Admiramos a muchas personas, creemos en muchas cosas, nos marcamos metas altísimas en la vida.
Poco a poco, la vida y los años nos van enfriando el corazón. Este enfriamiento hace que cada vez sean menos las pasiones y más la razón la que nos domine. Podemos odiar y querer, pero es muy dificil hacerlo con todo el corazón. Podemos estar tristes y felices, pero muchas veces relativizamos (sobretodo la felicidad) por culpa de la razón. También se hace cada vez más dificil el paso de la tristeza a la felicidad. Muchas veces nos ahogamos en el tedio y en la costumbre. Dejamos de admirar para pasar a despreciar, dejamos de creer en algo para simplemente observar en tercera persona como pasa la vida. Llegamos a un punto en nuestra carrera vital en el que decimos basta, hasta aquí he llegado. Esta es mi meta, no quiero nada más de la vida. Y allí nos quedamos, lejos, muy lejos de aquella meta tan alta que nos marcamos cuando el corazón aún estaba caliente.

El mecanismo que hace que el tiempo y la vida nos enfríen el corazón se llama indiferencia. Es una de las corazas sentimentales más antiguas que ha conocido la raza humana. “Mejor no vivir y no hacerme daño que vivir y arriesgarme a dañarme”. Este pensamiento es el paradigma de la indiferencia vital.

Ikiru, vivir, trata sobre lo expuesto más arriba. Es más, Ikiru es de ese tipo de películas que cuando la ves notas como el corazón se descongela un poco. Envia una serie de microondas sentimentales que hace que la capa de indiferencia que enfría el corazón se vuelva un poco más fina y puedas sentir por algunos momentos que tu cuerpo tiene corazón, que tu corazón tiene vida, que tu vida vive.
Townshend
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10
15 de septiembre de 2014
4 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
"Cinema Paradiso es una historia que trata sobre dos temas que derivan de uno de los grandes temas de la vida (y del cine): El Amor.

Los subtemas relativos al amor que trata son la pasión por algo y la amistad.

En relación a la pasión la historia se centra en la pasión por el cine. Esta pasión es la que hace que el personaje principal, un niño llamado “Totò”, pueda contrarrestar la tristeza y la amargura por haber perdido a su padre en la guerra.

La pasión es esa llama que tenemos encendida en algún lugar en nuestro dentro nuestro que, muchas veces, quiere ser apagada por los múltiples problemas y desgracias que nos acontecen en la vida. En el momento en que se apaga esa llama se entra en ese frío y azúl estado interior llamado depresión.

Hay personas que tienen una llama tan potente que es imposible de apagar, la combustión del fuego de la pasión da como resultado una existencia alegre con muchos momentos de felicidad.

Otras personas tienen una llama que se asemeja más a una chispa que a un fuego. Cualquier nimiedad la apaga y caen en el frío y azul estado descrito líneas más arriba.

Y, por último, hay personas que tuvieron un intenso fuego en su interior pero que, por circunstancias de la vida, lo apagaron ellos mismos y no lo han vuelto a encender de nuevo nunca más.

En todo caso, nuestro protagonista “Totò” logra encender esa llama en su interior haciendo del cine el combustible vital que le lleva a vivir parte de los mejores momentos de su vida.

El mejor resumen que se puede hacer en relación a lo que quiere transmitir la película sobre esta pasión está en una frase que el gran amigo de “Totò”, Alfredo, le dice en un momento de la historia. Ésta es:

“Hagas lo que hagas ámalo, como amabas la cabina del Paradiso cuando eras niño”.

(Con una frase de la película se ha resumido lo que he intentado explicar en un porrón de líneas. Eso dice bastante a favor del guión de Cinema Paradiso (y bastante poco de mi capacidad de síntesis)).

El segundo tema que trata la maravilla que estoy reseñando es la amistad. Personalmente creo que la amistad es el sentimiento de amor más puro que hay. Y lo es porque, a diferencia del amor que los Griegos llamaba el amor del “Eros”, en el amor típico de la amistad verdadera no hay ningún sentimiento externo condicionante como puede ser atracción física. Es incondicionalidad pura y simple.
Volviendo a los tipos de amor que describieron los griegos, sería el amor de la “Philia” o del “Ágape”.

Es la historia de amistad entre Alfredo, el operador de la sala de proyección del Cinema Paradiso, y “Totò”, el niño que acaba siendo un hombre y que se forma como persona, en gran parte, gracias a la amistad con Alfredo.

No voy a pararme a escribir sobre la amistad, sólo comentaré uno de los puntos importantes de lo que para mí significa este vínculo (y que en la película se ve claramente reflejado en la escena en la que Alfredo le dice a “Totò” la frase que he copiado anteriormente).

En ese punto de la película Alfredo renuncia a uno de los pilares de su felicidad para que “Totò” pueda tener la oportunidad de vivir su pasión por el cine. Creo que ahí está la clave de toda amistad. En el hecho que un amigo de los de verdad, (ésos que escasean tanto en el mundo real), sea capaz de renunciar incondicionalmente a parte de su felicidad para poder ayudar a que otro amigo pueda conseguir alcanzar sus sueños.

(SIGUE EN SPOILER)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
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