El cerebro del mal (1972)

Pobre, floja, irregular, interesante, chapucera, confusa y decepcionante producción que se apoya en una premisa interesante en la que no se desarrollan con acierto diversos puntos que consigan mantener el interés.
Mala y floja calidad técnica e interpretativa en un argumento que no consigue despertar el interés del espectador en ningún momento.
Hay algo que no funciona y la baja calidad en los diferentes puntos de apoyo, echan a perder el tiempo invertido en su visionado.
No es una película que me haya gustado y me temo que no la recomiendo a nadie que quiera disfrutar de un producto medianamente aceptable.
El cerebro del mal, está sin neuronas y no resulta muy inteligente.

Terminando de ver “Il Diavolo nel Cervello” (1972) de Sergio Sollima con Stefania Sandrelli, Keir Dullea, Micheline Presle, Tino Buazzelli, Renato Cestié, entre otros. Drama de suspense italiano, sobre un hombre apuesto que tropezó con el antiguo amor de su vida, pero ella parece no reconocerlo; donde el hijo de la mujer es el principal sospechoso de un crimen; pero el trauma inducido por ello, le impide a la mujer recordar los detalles, sin embargo, el asesino no se siente seguro… Este es un “thriller” terriblemente atmosférico y el director logra montar una conspiración de traición, adulterio y asesinato, pues lo que tenemos aquí es un misterio sin sangre ni desnudos, y supongo que eso es lo que aleja a la gente; tampoco hay nadie peleando herencias o jugando juegos psicosexuales; pero tiene una trama convincente y llena de suspenso, completa con pequeños defectos y todo, con giros inesperados, pistas falsas, un final de impacto genuino, pero sobre todo, una atmósfera continuamente siniestra, y una partitura musical fascinante del propio maestro Ennio Morricone. El giro que toma la película en sus últimos 20 minutos sorprenderá a muchos; pero otros, más habituados a tramas similares, habrán probablemente adivinado quién es el asesino antes de la primera hora… al tiempo que se cobra la factura de que es una película muy lenta. Del reparto, Keir Dullea hace un gran papel, tan ambiguo que uno no se lo espera; Tino Buazzelli como el médico, fue el mejor personaje de la película, con diferencia; pues no tiene ningún interés personal en el caso, y está genuinamente preocupado por el bienestar del niño y de su madre; Stefania Sandrelli como la madre con laguna mental está convincente, como su madre Micheline Presle que hace de La Condesa, y el niño, Renato Cestié, si bien llega a ser algo repelente, su ambigüedad es fascinante, y le hace tomarle cariño en el proceso final. Queda que la maldad reside en los lugares comunes, y como se traduce el título: “El diablo en el cerebro”
NO RECOMENDADA
NO tendrá nota en Lecturas Cinematográficas.
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