arrow

Atila frente a Roma (1954)

Atila frente a Roma
92 min.
5,8
780
Votar
Plugin no soportado
Añadir a listas
Sinopsis
Biopic de Atila, el temido rey de los Hunos. Siglo V de nuestra era. Cuando el imperio romano se halla divido en dos, el imperio Occidental en Roma y el imperio Oriental de Constantinopla, Atila (Jack Palance), rey de los hunos, acaudilla a todos los pueblos barbaros al norte del Danubio. Y mientras decide a cuál de ellos atacará primero, sus hombres capturan al centurión Marciano (Jeff Chandler) que lleva un mensaje desde Roma para el emperador de Oriente. Pero el romano atrayéndose la confianza de la hija de Atila, Kubra (Rita Gam), logra escapar y llegar hasta Constantinopla donde se involucrará en las intrigas palaciegas al servicio de la hermana del emperador, la princesa Pulcheria (Ludmilla Tcherina). Allí descubrirá un pacto secreto entre Atila y el emperador Teodosio (George Dolenz); en el que éste se compromete a no apoyar al imperio de Occidente si el jefe de las hordas barbarás se decide a atacarlo, siempre que éste respete las fronteras del imperio Oriental. Entonces los hunos emprenden la conquista de una indefensa Roma a la que sólo podría salvar un milagro. (FILMAFFINITY)
Género
Aventuras Biográfico Antigua Roma
Dirección
Reparto
Año / País:
/ Estados Unidos Estados Unidos
Título original:
Sign of the Pagan
Duración
92 min.
Guion
Música
Fotografía
Compañías
Links
6
El que vive por la espada, bajo ella perecerá.
Nos encontramos ante un decente péplum, una buena producción de la época, que más o menos sigue la cronológica narración de cómo se desarrollaron en realidad los hechos, es decir la división que en su día hizo Teodosio del imperio romano en 2, Occidente con capital en Roma y Occidente con capital en Constantinopla, y lo hizo en favor de sus hijos por la dificultad de su gobernación y las disputas internas para dominar tan vástago imperio, desde una centralizada Roma, en la película se ve representado como Valentiniano gobierna la parte occidente y Teodosio II la parte Oriente, pero ya prácticamente de forma independiente y desentendiéndose cada vez más de la suerte que pudiera correr un imperio respecto del otro. Por otro lado aparece uno de nuestros protagonistas llamado Marciano, pero que en realidad ese personaje fue Flavio Aecio, el cual en la realidad derroto a Atila en el campo de batalla y creció junto a él, tras los muros de Roma durante su juventud, cabe recordar, que Aecio es conocido como el último gran general romano, asesinado tras salvar a Roma de los hunos por su gran popularidad y sus desconocidas ansias de poder y por tanto no se convierte en emperador del imperio romano de oriente como sucede en la película. Atila no tiene ninguna hija conocida y menos cristiana, pero lo que sí ocurrió en realidad y está bien representado en el film, es el encuentro entre Atila y el papa León, todo un acierto en la película.
En definitiva Jack Palance hace un papelón haciendo de Atila, la película tiene buenos diálogos y muestra bien las inquietudes que pudo tener un guerrero supersticioso como Atila, respecto de la religión cristiana, pues la cinta cuenta con ciertas dosis de intercambios conversacionales entre paganos y cristianos, con cierto tono de humor negro.
[Leer más +]
13 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
7
LA ESPADA DE ATILA.
Un péplum de los de antes con riqueza de decorados y sin escatimar en nada. Atila se nos presenta como un rey ambicioso pero a la vez muy supersticioso y temeroso de los dioses. En su mente delirante la religión juega un papel preponderante si bien él mismo se nos muestra como un ser condenadamente diabólico, un líder nato pero enajenado a su vez; un peligro para los enemigos pero también para su propio pueblo. Jack Palance hace el papel de su vida interpretando a un rey rebelde que hizo la vida difícil a los romanos gracias a sus habilidades como líder y como guerrero sangriento. Un rey sin corona cuya faz hacía temblar a los legionarios, en suma, una verdadera leyenda surgida del Oriente.

Dos cosmovisiones enfrentadas y un imperio que se tambalea pero que aún conserva fuerza y poderío suficientes para amedrentar a sus más tenaces enemigos a base de orden y disciplina. De entre estos enemigos surgirá Atila, quizá el único capaz de derrotar al todopoderoso imperio, o si no al menos socavarlo.

Con Atila llega la anarquía y un poder hegemónico que sólo se vio truncado por la gracia de la emperatriz. El susodicho rey Atila se nos presenta sumergido en tinieblas y rodeado por un halo maldito que le convierte en un personaje inquietante y atractivo, un ser capaz de asesinar a su propia hija y al que sus guerreros obedecen ciegamente a pesar de dar serias muestras de demencia.

Realmente una película apta para el gran público si bien posee algunas escenas violentas y perturbadoras. A pesar de sus grandes cualidades debo decir que el final me pareció decepcionante para lo que yo esperaba. Por ello no puedo darle más de un siete como nota final.
[Leer más +]
11 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
Más información sobre Atila frente a Roma
Fichas más visitadas