Olmos y Robles, una pareja de ley (Serie de TV) (2015)

La serie es entretenida y tiene momentos divertidos, evidentemente no es una obra maestra y el actor cubano éste no hay quien lo entienda, pero para las series que se hacen en España, que todas son iguales, me parece que ésta tiene un aire fresco y simpático.

Otro alegre gasto para crear una serie absurda. ¿Es que no hay nadie competente en tve que niegue este tipo de trabajos? No se trata de contar con los medios económicos y técnicos necesarios, se trata de estudiar y trabajar una argumentación y unos guiones con calidad para que los telespectadores sepan que se les respeta.
Qué no vale cualquier cosa, señores. Que dos chorradas…, dos, con más pena que gracia, no da derecho a decir que la serie es cómica. La serie es chorra a más no poder, y la convierte en chorra el papel del señor Viyuela, un buen actor, buena gente, de acuerdo, pero hacer el ganso…, no; la verdad: hacer el gilipollas, descolocado, en un papel irreal, absurdo… con un personaje imposible y ridículo no es cómico; no nos confundamos.

Que la serie es un thriller mezclado con comicidad, como dijo al final el señor Flipy, el listo, es mucho decir; ya quisieras tú. De Thriller nada… Un caso expuesto que no se lo cree ni tu abuela haciendo un esfuerzo. Comicidad… ¿dónde? ¿En Filemón haciendo el gilipollas? Creo que hay más comicidad en el otro, lamentablemente.

Por favor, consideren a los personajes creíbles si la serie va en serio. Si va en serio, seriedad; y de ahí, trabajar para crear situaciones en los que los espectadores al menos, no se sonrojen, el que sonrían ya vendrá después. ¿A qué viene ese sadismo de cuerpos sin cabeza? ¿Cómo mezclan algo tan terrible como una ejecución yihadista para pasar a continuación con chorradas sobre un cerdo atropellado en la carretera…? ¿De qué va la cosa? Algo sin sentido. Gente de pueblo gritando como paranoicos y un alcalde patético estereotipado al máximo… No hay más que auténticas pruebas de la falta absoluta de imaginación.

¿Y las figuritas de madera? Cuando ha ido Filemón a sacarlas del letrero de la calle he tenido que centrarme durante un buen rato por tamaña incongruencia; y luego he mirado por la ventana para confirmar que el mundo seguía su curso… con normalidad.
Los olmos y los robles no dejan ver el bosque. El bosque es sencillo, no querer enredar lo que no se puede enredar. Sencillez, casos cotidianos y comportamientos normales, joder. Las sonrisas no se exigen, se encuentran; se ofrecen, y hace falta mucha elegancia para ofrecerlas si se quieren conseguir por medio de una serie televisiva que tenga clase de verdad.