Al filo de la oscuridad (1943)

Como Un paseo bajo el sol o El extraño amor de Martha Ivers, Al filo de la oscuridad es fruto de la colaboración entre el ya por entonces prestigioso guionista Robert Rossen (por entonces sólo guionista; su debut como director no llegaría hasta 1947) y el director Lewis Milestone. Es una película de estudio, no lo que luego se llamaría una "obra de autor", y sin embargo está totalmente marcada por la personalidad de estos dos notables creadores.
Dirigida en 1943, en plena guerra mundial, es una obra valiente (aunque seguramente planeada ya después de la entrada de Estados Unidos en la contienda -diciembre de 1941-) que plantea la necesidad de tomar partido contra el nazismo, describiendo para ello la épica de la rebelión contra la ocupación alemana de un pequeño pueblo pesquero de Noruega. Rossen, anti-nazi convencido hasta cuando adaptaba a Jack London en El lobo de mar (1941), parece tan interesado en la lucha de los rebeldes decididos, como en el drama de los delatores o en la toma de partido de los indecisos. Aunque, quizás por encima de todo ello, su interés se dirige no sólo a la denuncia, sino a la descripción y comprensión de los mecanismos de poder del terror, que alimentando todo lo más vil que hay en la naturaleza humana, lleva a considerar como simples medios la violencia y la humillación, formas establecidas de conseguir el sometimiento a no se sabe muy bien qué ideal exacerbado de autoridad. Una brutalidad llevada al límite cuando, además, se puede llevar a cabo desde la total impunidad. La humillación en el nazismo no era un caso particular o la excepción de algún esbirro, sino una solución sistemática.

Es curioso, con menos de dos días de diferencia me he visto dos películas que podrían ser primas hermanas como son ésta que nos ocupa "Al filo de la Oscuridad" y "Ataque al Amanecer".
Misma temática, parecido mensaje, localizaciones y ambientaciones parecidas... vamos que la sensación de "deja vu" era constante... la diferencia fundamental estriba en que una fue dirigida por un maestro como Milestone y la otra por John Farrow y la diferencia es abismal...
Ambas intentan ser aleccionadoras contra el régimen nazi pero mientras una se queda en un panfleto bienintencionado la otra se erige en una obra de altura con secuencias para el recuerdo (me viene a la mente la de la reunión en la iglesia pero hay muchas más).
Teniendo en cuenta que los técnicos que estaban al cargo de ambos directores eran reputados profesionales y que los actores en ambas son de primera fila las diferencias a nivel de calidad las achaco sin duda a la labor de los directores.
En conclusión "Al filo de la Oscuridad" es un filme que se eleva por encima de su mensaje para quedar como otra muestra del talento indiscutible de uno de esos directores que el gran público no conoce pero que los cinéfilos tenemos que reivindicar de vez en cuando para que se haga justicia. A disfrutarla.