La última y nos vamos (2010)

La fiesta es igual pero distinta en todas las partes del mundo. Igual: porque se quiere diversión, casi siempre alcohol y triunfar, es decir, conseguir acabar con una persona sea del sexo que sea. Simplemente que te guste.
Y distinto: por el sitio donde se esté. De la compañía. De acabar amaneciendo o dos días después. A eso me refiero.
Me gustó esta película porque dentro de un grupo de amigos al final se ve que no son tan amigos como parecen. Que la mayoría solo se juntan para ir de fiesta. Para tomar la última.
La banda sonora es muy buena: Soda Stéreo, mariachis, Young Folks.., amenizan la película y la hacen pasar en un suspiro. Está además hermosamente retratada la ciudad de México. Aparecen muchas zonas de muy distinto calado en esa sociedad tan extremista.
Para mí lo peor son muchas de las interpretaciones. Muchas no están nada acabadas y muy forzadas.
Una buena película para ver México por dentro y por fuera.

Miércoles 24 de marzo, 7:10 pm, Cinemex Tenayuca. Desde hace algún tiempo para quienes habitamos este monstruo de ciudad (México), se nos ha impuesto el llamado alcoholímetro, el cual como es de suponer mide los niveles de alcohol en sangre para evitar accidentes, por aquellos imprudentes conductores que circulan con copas de más por calles y avenidas de la gran urbe. Ignoro si dicho programa fue el origen de esta nueva trama escrita y dirigida por Eva López Sánchez, en la que solo encuentro estereotipos muy empatados con los personajes de Teresa Suárez en Así del precipicio (también producción de Cinépolis), dónde las drogas son el principal motor de sucesos que desatan el desmadre, depresión y caos entre las jóvenes protagonistas.

Aquí con cuatro tipos masculinos y con escenas forzadas dentro del género, no hay nada convincente; cuatro perfiles, jóvenes con buena posición económica que han decidido comenzar el viernes social en Garibaldi, una plaza de tradición en la que el alcohol, la música, el cigarro y ya entrados en copas el “table dance” no pueden faltar; cada uno de ellos tomará su camino y se verán inmiscuidos en diferentes situaciones (riesgo, enamoramiento e ira). Con esta pequeña sinopsis no se cuenta mucho de toda la serie de acontecimientos deparados por la guionista a sus personajes, pero aseguro que con 87 la película jamás logra la chispa generada por Teresa Suárez en su película, se vuelve tediosa y concluyes ¿por qué no se les da oportunidad a otro tipo de guiones para ser filmados?

Muy pobre, escasas risas y psicología de personajes dibujados y un mensaje evidentemente transmitido hacia el público a quien especialmente va dirigida la cinta, cuidado con el alcohol.