Unidas por la sangre (2015)

Cuesta entender qué quiere contar esta película, si la historia de un reencuentro, la del destino inexorable, la fuerza de la sangre o vaya uno a saber.
La cosa es que hay poco y nada, el personaje de Jessica Beal es innentendible, por qué se ata tanto a su hermana, tampoco sabemos si el vinculo que se establece entre ellas es positivo o negativo.
Lo poco claro que deja ver es su crítica a los nuevos hippies californianos, y ya, si se rasca no se encuentra mucho más que una buena fotografía, interpretaciones correctas, pero para una historia sin contenido, ni fuerza, le falta alma, corazón y vida, para conmover, tener gracia, ingenio o aunque sea generar empatía con las protagonista, se queda solo en una propuesta aburrida y pretenciosa.

Jessica Biel interpreta a una especie de Thelma, una aburrida y sosa profesora de Yoga, que vive con su novio, del que descubrirá que es gilipollas y un calzonazos cuando surgen las primeras discusiones. Zosia Mamet una prostituta buscando redención, una Louise que se las sabe todas sobre cómo vivir la vida. Ambas se conocen, creen que son hermanas, no lo son. Y poco más es lo que cuenta la película. Un auténtico tostón, aburrida, lenta. No sé si es que es una peli sólo para mujeres y yo no sé captar lo buena que es, o es que realmente es así de mala. La transformación de Jessica Biel se muestra de forma demasiado apresurada, tanto, que el final de la película en ningún momento es creíble.