Dragon Ball Z: ¡Fusión! (1995)

Dragon Ball Z: ¡Fusión! Es una película independiente de la serie de animación emitida en TV. La historia se sitúa aproximadamente entre los episodios 248 al 265 de Dragon Ball Z. Su duración apenas ronda los 60 minutos, lo que hace que la película sea cómoda y fácil de ver. Shigeyasu Yamauchi realiza su tercer mediometraje sobre Bola de Dragón de forma notable, encandilando a los fanáticos de la serie de una forma correcta.

Dentro del Otro Mundo, que es el espacio donde va a parar todo ser viviente cuando muere, se está disputando en el reino de Dai Kaio un torneo de artes marciales. Allí, Son Goku y Paikuhan disputarán la final. Paralelamente, en el Infierno, que es el lugar a donde van las almas condenadas, un joven llamado Oni es el encargado de purificarlas mediante una gran máquina. La función de la gigantesca máquina será la de quitar a las almas su parte negativa. Por un despiste del propio Oni, la máquina explotará envolviendo al joven en una nube de gas, transformándolo en un monstruo gigantesco (llamado Janemba) cargado de la energía maligna que depositaba el aparato. Este suceso ha provocado que los muertos vuelvan a la vida en la Tierra provocando el miedo y la destrucción. Goku, deberá hacer frente a esta nueva amenaza llamada Janemba para volver a mantener el orden y equilibrio en el Otro Mundo y por extensión en La Tierra.

El reparto, que es ficticio, lo encabezará Son Goku al que veremos por segunda vez adquiriendo el nivel tres de Super Sayajin (la primera vez fue en la serie de TV) para poder combatir con Janemba. Vegeta que aparecerá al rato, ayudará a Son Goku. El carácter de Vegeta está claramente resaltado ya que es un personaje dotado de gran orgullo, envidia y celos hacia Goku. Por último, el joven Oni, que tras envolverse en la energía negativa se convirtió en el monstruo Janemba, un ser gordo, gigante y amarillo que poco después adaptaría una forma más evolucionada para luchar convirtiéndose en un temible enemigo.

Shunsuke Kikuchi realizará la banda sonora de la película aportando temas originales de la serie de TV y poco más. También escucharemos el tema de apertura y final creado por Hironobu Kageyama.

En conclusión, la película ¡Fusión! se mantiene fiel a la saga de Dragon Ball Z ofreciéndonos una vez a Son Goku, que como bien dice el título, se acabará fusionando para poder vencer a Janemba. Y aunque el proceso para realizar la fusión sea algo “ridículo” el resultado final gustará.

De "Dragon Ball" hay varias series de televisión y unas cuantas películas también. Es evidente que el paso del tiempo ha confirmado que es una saga de animación que ha triunfado de pleno, desde luego no le faltan razones para ser un buen producto. Así que lo primero que quiero hacer es alabar esta idea tan bien llevada a cabo por su creador Akira Toriyama. "Dragon Ball" es una obra muy extensa, que tiene una enorme cantidad de personajes, personalmente no he visto todas las series y películas que hay sobre ella, así que mi conocimiento es limitado a la hora de enjuiciar este filme. Centrándome en el producto que nos atañe, "Dragon Ball Z: ¡Fusión!" me ha parecido una estupenda película, es directa, va al grano, y no le falta de nada. Tiene acción, vistosas peleas entre personajes poderosos, toques humorísticos, y su guión es sugerente. La historia transcurre en dos frentes: Por un lado, en el mundo del más allá, Son Gokuh y Paikuhan deben enfrentarse a un terrible adversario, Janemba. Este ser siembra el caos en el infierno y en el mundo de los vivos, tras producirse un terrible accidente que transforma a un alelado sirviente en el susodicho monstruo. El otro frente de la acción tiene lugar en el mundo de los vivos, al volver a la vida todo tipo de malvados peligrosos que se han unido bajo el mando de Freezer. Son Gohan, Trunks y Son Goten se enfrentan a ellos en un intento de evitar que arrasen por completo el mundo. Bueno, a mí me ha gustado muchísimo la historia que transcurre en el infierno, los combates contra Janemba han estado muy bien y toda esa parte ha sido bastante amena. Sin embargo, no me ha molado mucho que digamos la parte que ocurre en el mundo de los vivos. De todos modos, la película en conjunto se deja ver en todo momento, tiene un colorido llamativo y el poder de la fusión (eje central del relato), proporciona momentos de batallas y de humor muy acertados. A excepción del poco atractivo de lo que sucede en el mundo de los vivos y de algunas animaciones en los momentos claves de las peleas, que las podrían haber hecho un poquito mejor, el resto del producto es bueno. Recomiendo su visionado para lo fans de la saga y para cualquier seguidor de películas anime.