Vampiresas de 1935 (1935)

Me parece asombroso que ningún colaborador haya escrito en Filmaffinity España sobre este magistral musical, que posee una gran carga social (todos o casi todos los personajes del hotel de lujo en el que se desarrolla la acción tratan de sacarle el dinero a los millonarios que se alojan ahí para descansar, y además se habla de ello sin tapujos), una desinhibición moral propia todavía del cine pre-código Hays que se observa hasta en su título original (que alude a unos "buscadores de oro" que son los trabajadores del hotel), y unas buenas interpretaciones del reparto, encabezado éste por un Dick Powell juvenil y cantarín.

Pero si esta película destaca y se merece un diez en la escala Filmaffinity es por el número musical del final, "Lullaby of Broadway", una película en sí misma, con un vocabulario que hay que entender en un sentido figurado (los "papás" son los hombres ricos que tienen una amante, la "nena" de la letra), con un mensaje moralizante (la "búsqueda de oro" puede acabar mal para la "nena"), y con un lenguaje visual deslumbrante y muy sofisticado, en el que incluso se llega a un tipo de cine experimental o de vanguardia, por ejemplo cuando el rostro de la actriz que encadena la acción de esta especie de sueño/pesadilla se convierte en una ciudad-calavera. Es un fragmento que derrocha inventiva, audacia, imaginación, talento y sensibilidad, y seguramente es un momento cumbre de la filmografía de su director. En suma, es un film a descubrir o a redescubrir.

Como suele ocurrir en los musicales, la trama es ligera, a veces mera excusa para la introducción de los números musicales. Así, la organización de un festival benéfico en el propio hotel viene al pelo para tal propósito.

Las travesuras románticas abundan entre los huéspedes de un hotel de lujo, incluido un director de escena, un millonario excéntrico y la hija de un patrocinador financiero, con algunos gags verdaderamente cómicos..

estaca entre todos el número "Lullaby of Broadway", cuya canción obtuvo el Oscar, y reveló a la encantadora Wini Shaw. El diseño de producción, inspirado en el 'art-déco', rebosa distinción. Un 6.