El jinete del amanecer (2012)

Remake innecesario e impersonal de una película olvidada del John Wayne pre La Diligencia, " El jinete del alba". Como esta vez en Filmaffinity no pone el argumento ahí va: un vaquero regresa a su pueblo para visitar a su padre, con el que parece que no se lleva muy bien. Ese mismo día, atracan la oficina de correos donde trabaja su padre y lo matan. La bella del pueblo lo cura cuando intenta defender a su padre.

La película intenta contarnos varias historias pero se ve lastrada por el pésimo actor que es Christian Slater ( a quien el tiempo ha puesto en su sitio). El gran Donald Sutherland apenas logra salvar la película con su presencia en contadas ocasiones, La historia de amistad entre el jugador de cartas y el vaquero "interpretado" por Slater es muy forzada, al igual que la de amor. El falso triángulo amoroso se desvanece como un terrón de azúcar. Solo nos queda un leve suspense de cómo sabrá el vaquero quién mató a su padre ( que los espectadores ya sabemos) en la escena del anillo, que se intuye también.

Solo vale para una hora de sesteo delante del televisor.

Después de un balazo en el pecho y las curas y atenciones que le prodiga Alice Gordon (Hennessy), la guapa del lugar, John Mason (Slater) se recupera para perseguir a los asesinos de su padre, mientras un marshall (Sutherland) va a su vez tras él con un grupo de torpes agentes. Por el medio anda enredando Ralph, amigo de infancia de Mason y hermano de Alice, a la que a su vez pretende otro amigo.
Bellos paisajes, buena música country y buena fotografía, pero interpretación bastante mediocre de los principales protagonistas, Sutherland al margen. Película con una trama argumental que no termina de estar clara, bastante embarullada, poco creíble a veces y, sobre todo, desarrollada con gran lentitud.
Al margen del "rasguño" de la cabecera que cura con éxito, Alice tendrá que aplicar también tintura de yodo en las heridas producidas en las peleas que se producen. Para lo que no tiene remedio es para mitigar las borracheras y el alcoholismo que parecen padecer todos los personajes.
En resumen un western discreto, pero con el mérito de haberse rodado en una época poco propicia para el género.