Redline (2009)

Hacía tanto que no veía algo tan espectacular, ya sea en animación o imagen real, en series o películas. Realmente la adrenalina fluye viendo esta película, hasta el punto de entrarme mareos y sudarme las manos, porque las escenas de carreras son espectaculares. Todo ello unido a una estética ciberpunk de lo más surrealista y a un estilo de animación de novela gráfica pop muy colorida, con tintes retros y del siglo XXI, con algún toque de mecha. Personajes estilizados, acción desbordante, estética que hace referencia a grandes clásicos del género ciencia ficción, pareja protagonista de gran calado y carisma, banda sonora contundente, todo eso y mucho más hacen de esta película una rareza inexplicable en palabras que solo puedo recomendar encarecidamente a todo el mundo amante de la velocidad, el anime y la acción a raudales. Puede que sea una mezcla de cosas ya vistas, pero es una fusión muy bien hecha, con añadidos originales. Nunca me había dado por acercarme al largometraje de animación japonesa, pero después de ver esta maravilla y dado que me he visto todas las series anime buenas (y parece que últimamente salen pocas de calidad), me afanaré en buscar películas de este estilo, y espero que los responsables de Redline hayan hecho más cosas para poder verlas. Hay que ver lo que me estaba perdiendo.

Takeshi Koike director del cortometraje Animatrix: World Record y uno de los directores de Animatrix y Iron Man la serie de animación japonesa que se lanzó en 2010 nos deleitó el mismo año con una producción de calibre.

Redline, producida por la famosa productora Madhouse es una historia de ciencia ficción, amor y mucha adrenalina en la cual se cuenta que vio la luz mas tarde de lo previsto con un desarrollo de 7 años y ultlizó mas de 100.000 dibujos hechos a mano, lo que se vio inusual ya que Koike por así decirlo debutaba como director.

Entrando de lleno en el argumento hay que decir que es el apartado mas flojo, soso y sencillo de este largometraje de animación, donde nos narra la vida de un futuro dominado por caninos humanoides y robots en un planeta donde su mayor entretenimiento son las carreras de automóviles. Todo comienza cuando nuestro protagonista llamado JP es clasificado para el gran evento mundial de carreras, la ''Redline''. Allí conoce a Sonoshee una carismática corredora que le resulta muy familiar y hace todo lo posible por conocer.
La historia secillamente es eso, carreras de coches, adrenalina, un amor un tanto atipico fomentado por la acción a raudales que ofrece.

Redline donde más destaca es en su animación que hay que decir que es sencillamente brutal, adulta, con un acabado de dibujo que nos llamará la antención desde el fotograma cero y una paleta de colores muy vistosa y llamativa. Por culpa de esta estupenda animación nos mantendrá los 98 minutos pegados al asiento.

El apartado sonoro goza de temas musicales electronicos muy movidos y que encajan como anillo al dedo con la animación. No hay mucho que comentar, es correcto y no nos dejará indiferentes.

Entrando en la conclusión no busquéis una gran historia que nos haga pensar, ni una historia que recordar. Redline de Takeshi Koike será recordada por tener una historia sencilla, sosa y una animación de lo mas brutal.

Saludos.