Unos pocos minutos bastan para crear un corto simpático que refleja una situación bien paradójica. Borja Cobeaga conseguirá contentar a los pertenecientes al humor de los dos bandos. Los que tengan un sentido del humor más básico y los que busquen algo más que el caca culo pedo pis clásico de muchas comedias encontrarán en este novio de mierda una producción bastante agradecida, y todo ello sin realizar grandes esfuerzos.