Escribí una primera crítica habiendo visto las tres primeras temporadas. Ahora, disfrutadas cinco de las seis que la componen, veo que me quedé corto en la explicación.
Creada y producida por Bill Lawrence (creador también de Spin City), esta serie desarrolla guiones excepcionales que siempre siguen un mismo esquema: el protagonista (JD) va narrando, con su voz en off, tanto sus ideas e impresiones como todo lo que acontece durante el episodio, que son historias muy cercanas y reales sobre la amistad, las personas, sus ideales y sus defectos. Todo ello salpicado de unos diálogos brillantísimos, un humor cargado de surrealismo gracias a la escenificación de los desvaríos del prota, y unas bandas sonoras de ovación cerrada.
Los seis personajes principales están perfectamente interpretados y desarrollados, y además se benefician de secundarios de igual nivel, a los que en varios capítulos (en los que el doblaje lo permite) podremos apreciar que también poseen unas notables cualidades para los números musicales, tanto en la faceta del canto como en la del baile.
Y, para acabar de rematarlo, esta serie contiene pequeños papeles (aunque algunos se repiten en más de dos y tres episodios) interpretados por gentes como John Ritter, Brendan Fraser, Heather Graham, Colin Farrell, Matthew Perry, Tara Reid, e incluso la última aparición ante las cámaras del señor Michael J Fox (en un papel de dos capítulos verdaderamente sobresaliente e inolvidable).

Injustamente emitida en este pais en horario matutino, y sin la campaña publicitaria que han gozado otras series muy inferiores, es casi una absoluta desconocida y una joya a descubrír. De hecho, otras series han bebido de esta fuente sin reparos y contado de inmediato con el beneplácito del público: entre ellas, el personaje del Dr. House es casi un calco del Dr. Cox que aquí vemos; la serie "Todo el mundo odia a Chris" no solo repite esquema sino que varios episodios de Scrubs fueron dirigidos por Chris Tucker, su creador; y la que más se acerca a la fotocopia es la tan celebrada "Anatomía de Grey", a la que en la quinta temporada los guionistas de Scrubs mandan un recado, en el diálogo que dice así:
-(Dra. Eliot) "¿Por que no nos vamos a casa y vemos Anatomia de Grey en pijama?
-(Dr. JD) "Huy, me encanta esa serie: es como si vieran nuestras vidas y las pasaran en la tele"
En fin: que se trata de una de las mejores series jamás emitidas, pero de las más desconocidas y poco apreciadas que han pasado por nuestra pantalla, y que desde aquí recomiendo a todo aquel que guste de pasar un muy buen rato, con escenas de verdad divertídas, pero notando que lo que le cuentan tiene un poso de inteligencia y mensaje veraz a tener en cuenta.
Como curiosidad, comentar que la tendencia del Dr. Cox a llamar al prota con nombres de chica es una sugerencia del propio actor, que tiene esa costumbre con uno de sus mejores amigos (y padrino de su boda) que no es otro que el también actor John Cusack.